ROMPE SU SILENCIO
El rey Carlos de Inglaterra se ha pronunciado por primera vez después del anuncio de su cáncer con un comunicado en el que ha agradecido los mensajes de cariño.
La impactante noticia del cáncer de Carlos III ha recorrido todo el mundo. Desde que su enfermedad fuera diagnosticada recientemente, mientras era intervenido por un agrandamiento benigno de próstata, el Rey de Inglaterra se ha puesto en manos de los médicos y ha comenzado un tratamiento que le mantendrá más alejado de lo habitual de los compromisos de la Casa Real Británica.
Con los ciudadanos británicos en vilo tras el anuncio, y del hermetismo alrededor del verdadero estado de salud del monarca, ahora ha sido él mismo quien, mediante un comunicado publicado por el Instagram de la Familia real, ha roto su silencio.
En la carta firmada a su nombre, el hijo de Isabel II ha agradecido "de todo corazón" los mensajes y las muestras de cariño que ha recibido desde que se hiciera público su diagnóstico. Se trata del primer mensaje que lanza desde que el Palacio de Buckingham anunciara su enfermedad, aunque reapareció ante las cámaras en los últimos días.
"Como sabrán todos aquellos que han sido afectados por el cáncer, esos pensamientos amables son el mayor consuelo y aliento", ha expresado.
"Es igualmente alentador escuchar cómo compartir mi propio diagnóstico ha ayudado a promover la comprensión pública y arrojar luz sobre el trabajo de todas aquellas organizaciones que apoyan a los pacientes con cáncer y sus familias en todo el Reino Unido y el resto del mundo. Mi admiración de toda la vida por su incansable cuidado y dedicación es aún mayor como resultado de mi propia experiencia personal", añadió.
Estas palabras llegan después de que su hijo mayor, el príncipe Guillermo, heredero de la corona británica, pronunciara las suyas tanto por su mujer, Kate Middleton, que también ha tenido problemas de salud, como por su padre, a quien ha sustituido en algunos actos oficiales.
Junto a él, la reina Camila también tuvo una breve conversación con un paramédico que trabaja en cuidados intensivos de Wiltshire Air Ambulance, un servicio de helicópteros para emergencias, a quien dio la última hora de salud de su marido.
Hace unos días, el monarca reapareció ante las cámaras, junto a su mujer, abandonando la residencia oficial de Clarece House, en Londres, para trasladarse a Sandringham, en el condado de Norfolk.
No obstante, continuará atendiendo algunas de sus funciones específicas de Estado, como firmas de leyes o los contactos telefónicos semanales con el primer ministro británico, Rishi Sunak.