CLÁUSULA DE ESCÁNDALO
La cantante norteamericana ha sido precavida y ha firmado un acuerdo prematrimonial para proteger su patrimonio antes de pasar por el altar.
Britney Spears y el actor Sam Asghari se dieron el 'sí quiero' el pasado 9 de junio en la mansión que tienen en Los Ángeles. La pareja llevaba 6 años de relación y vieron su sueño cumplido en una ceremonia muy romántica e íntima, con tan solo 60 invitados y ningún familiar de la artista.
Mathew Rosengart, el abogado de Britney Spears
Una de las personas que no podía faltar al enlace es Mathew Rosengart, el abogado de la cantante que durante los últimos meses se ha convertido en su ángel de la guarda. Gracias a su esfuerzo, Britney Spears se vio liberada de la tutela legal a la que su padre la había sometido.
Parece que el abogado siempre vela por sus intereses y, en esta ocasión, no podía ser de otra manera. Fuentes cercanas a la pareja de recién casados señalaron al medio TMZ que Britney Spears y Sam Asghari han firmado un acuerdo prematrimonial para blindar el patrimonio de la cantante ante un posible divorcio.
Fortuna valorada en 60 millones de dólares
La revista Forbes valoró en 2021 que la princesa del pop tenía una fortuna que rondaba los 60 millones de dólares. Así pues, no es de extrañar que haya seguido los consejos de su asesor legal y haya sido precavida a la hora de proteger su dinero.
En una cláusula del contrato prematrimonial consta que Sam no podrá beneficiarse ni de un solo dólar de la fortuna que su mujer tenía antes de casarse con él. Nada dice del dinero que la cantante pueda generar en un futuro.
En el caso de que el matrimonio llegara a su fin, Asghari únicamente podría optar a la parte proporcional de las ganancias obtenidas durante el matrimonio, más las posibles compensaciones por hijo, en el supuesto de que tengan más descendencia; algo muy probable dado que la artista ha manifestado su deseo de volver a ser madre. La pareja ha sabido sobreponerse después del aborto espontáneo que Britney tuvo a principios de mayo.
Contrato prematrimonial de Britney Spears
Un acuerdo de este estilo no le pudo coger por sorpresa al actor, puesto que Britney Spears ya había firmado uno con su anterior marido, Kevin Federline. El bailarín no era bien visto ante los ojos de su familia y acabó recibiendo un millón de euros como compensación matrimonial, además de custodia compartida de sus dos hijos en común -que por aquel entonces tenían seis meses y año y medio-, después de que Britney completara un tratamiento de rehabilitación en marzo de 2007.
El inicio de la relación
Fue el trabajo el que unió a Sam Asghari y a Britney Spears. A pesar de que el actor quería centrar su carrera en cine y televisión y alejarse de los vídeos musicales, Britney eligió su foto personalmente para participar en el vídeo del tema 'Slumber Party' que se grabó en 2016. La relación se formalizó en 2018 cuando Britney compartió en sus redes sociales su anillo de compromiso.