PARECIDA A SU ABUELA
La joven se mantiene alejada de la actividad pública lo más posible y se centra en su labor más solidaria: es fundadora y presidenta de la asociación Be Safe Monaco y forma parte de la Cruz Roja del país.
El 15 de julio de 1998 nació Camille Gottlieb, la hija menor que Estefanía de Mónaco tuvo con Jean Raymond Gottlieb, su guardaespaldas. De los tres hijos de la princesa, Camille es la que ha preferido mantenerse al margen de los focos públicos, al contrario que sus hermanos Louis y Pauline Ducruet. Aun así, es bastante activa en Instagram, donde va colgando fotos de sus escapadas y aficiones.
Efectivamente, Camille no se encuentra dentro de la línea de sucesión al trono. El motivo es que cuando nació, sus padres no estaban casados.
Un caso parecido les sucedió a sus hermanos. Louis nació en 1992 y Pauline, en 1994. En ese momento tampoco estaban dentro de la sucesión y no se incluyeron hasta el 1 de julio de 1995, cuando se casaron sus padres, la princesa Estefanía y Daniel Ducruet.
Si nos fijamos en esta línea, la princesa de Mónaco ocupa el puesto número 14, seguida por Louis (15) y Pauline (16), siendo ellos tres los que cierran la lista.
Será Jaime de Mónaco, el hijo de Alberto II y que actualmente tiene 10 años, el príncipe sucesor.
Camille es la presidenta de la asociación Be Safe Monaco, que ella misma creó en 2017 con el objetivo de prevenir accidentes y concienciar a los ciudadanos sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol. Sobre todo, se dirigen a los jóvenes y, tal y como dicen en su página web, utilizan la educación "como medio de prevención" para "dotar a los jóvenes de los conocimientos y herramientas necesarios para tomar decisiones responsables mientras conduce".
Además de estar centrada en su asociación, Camille forma parte de la junta directiva de la Cruz Roja de Mónaco, en la cual es responsable de la división de Juventud y Futuro, un cargo que le ofreció su tío, el príncipe soberano Alberto II. En una entrevista a la revista Gala, dijo estar muy emocionada cuando él le ofreció este puesto: "Desde pequeña me he sentido atraída por el mundo asociativo y la ayuda mutua", confesó.
En este mismo medio, cuenta que este lado más solidario se lo inculcó su madre, tanto a ella, como a sus hermanos: "Nos inculcó a mi hermano, a mi hermana y a mí el respeto por los demás y un principio esencial: ayudar al prójimo sin esperar nada a cambio". Y critica el postureo de aquella gente que cuelga fotos y vídeos en las redes sociales mostrando cómo ayudan a los más desfavorecidos o haciendo una donación: "Para mí no es natural. Los ayudantes no se muestran".
Además, colabora con la sociedad protectora de animales y con la organización benéfica de su madre, Fight Aids Monaco. Y si por si no fuera poco, este año ha creado su propia empresa de comunicación.
En la revista Point de Vue, la joven explica que vive con su madre, con quien le gusta ver juntas series de televisión, y su buena relación con ella.
En alguna ocasión, también ha hablado de su abuelo, el príncipe Rainiero III, quien falleció en 2005. Aunque ella era muy pequeña, recuerda que tenía una relación "bastante especial con él", que lo admiraba y que nunca lo ha dejado de hacer. Relata que fue "un hombre extraordinario, muy cariñoso y muy divertido".
Respecto a su abuela, la princesa Grace Kelly, hay quien le encuentra un gran parecido físico.