LA CANTANTE SE HA VISTO EN LA OBLIGACIÓN
Ariana Grande ha sido una de las cabezas de cartel del primer fin de semana del Festival de Coachella. Pero la cantante se ha convertido en la protagonista de las redes sociales por otro tema, y es que una alarmante foto que publicó preocupó mucho a sus fans, por lo que ahora se ha visto obligada a pedir perdón.
Ariana Grande ha sido una de las principales cantantes que este fin de semana ha actuado en el Festival de Coachella. De hecho pudimos verla actuar junto a N’Sync, la mítica boy band en la que comenzó Justin Timberlake.
Pero si por algo ha sido noticia estos días la cantante no ha sido por su actuación, sino por otro tema. Y es que recordemos que hace ahora casi dos años que Ariana vivió uno de los momentos más fatídicos de su vida, cuando un ataque terrorista durante su concierto en Manchester acabó con la vida de 22 personas.
De aquel duro golpe, a Ariana le quedaron secuelas ya que desde entonces sufre un trastorno postraumático que todavía no ha superado, y del cual quiso mostrar las secuelas en unas fotos que compartió hace unos días a través de sus redes sociales.
En las fotos podíamos ver a la artista comparando su cerebro con otro que no está bajo ninguna afectación, lo que provocó que sus millones de fans se preocuparan mucho por ella. Tal fue el grado de preocupación que generó, que Ariana se ha visto en la obligación de pedir perdón a sus seguidores.
Así la artista ha querido explicar que su intención era la de alertar sobre la necesidad de buscar ayuda cuando te ocurra algo así y no dejarlo correr. Sus seguidores, aun así, no han dejado de mandarle mensajes de apoyo, por lo que ha querido dejar claro que su intención no era la de crear un alarmismo innecesario.