VIVÍA UN MOMENTO MUY DULCE
Álex Casademunt pasaba últimamente por un momento muy dulce. Volcado en su hija Bruna, feliz con su actual pareja y muy ilusionado con sus proyectos profesionales, nadie podía presagiar su triste final.
Álex Casademunt fallecía este martes en un fatal accidente de tráficoque ponía fin a su vida a los 39 años. Una muerte que ha dejado completamente desolada a su familia, así como a sus excompañeros de Operación Triunfo que inundaban las redes sociales de mensajes dándole su último adiós.
De hecho, algunos de ellos pusieron rumbo a Mataró para despedirle, y así podíamos ver en la estación del tren a Chenoa, David Bustamante, Natalia Rodríguez o Manu Tenorio muy afectados ante esta terrible pérdida de un compañero que era uno más en la gran familia que formaron hace veinte años tras su paso por el exitoso programa.
Álex pasaba ahora por un dulce momento. De hecho, desde que se convirtiera en padre de su única hija, Bruna, parecía haberse centrado totalmente. Aunque rompió con la madre de su pequeña, Laia, poco después de que esta viniera al mundo, lo cierto es que seguían manteniendo una buena relación por el bien de su hija, y de hecho se ha podido ve a la joven completamente devastada en el tanatorio abrazada a la madre del cantante.
Pero Álex también tenía una pareja que la había vuelto a hacer sonreír y con la que estaba muy feliz: una joven llamada Judit Puig que era también su socia, ya que ambos estaban al frente de una empresa de calcetines llamada SonSocks. Juntos pasaron las vacaciones del pasado verano junto a la pequeña Bruna y así lo compartieron en sus redes sociales, muestra del buen momento que estaban viviendo juntos.
Además, desde su discográfica han asegurado en su mensaje de despedida al extriunfito que este estaba trabajando en un nuevo proyecto: un single que vería la luz en las próximas semanas. Sin duda alguna, un duro golpe para todo su entorno que ha visto cómo han tenido que decirle adiós a una persona muy querida.
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