ENTRANTE RIQUÍSIMO
El entrante que te presentamos a continuación es perfecto para las comidas y cenas navideñas que ya están a la vuelta de la esquina, pero claro está que lo puedes preparar en cualquier ocasión especial (o, simplemente, cuando te apetezca).
Se acercan días en los que nos reuniremos con la familia y pasaremos unos buenos ratos comiendo unos deliciosos manjares. Para alimentar a todos tus invitados, no es necesario pasar muchas horas en la cocina, hay recetas de lo más sencillas y rápidas de preparar para ahorrarte un montón de tiempo y poder estar más por los tuyos. Como por ejemplo, estos volovanes de pollo y champiñones que nos propone Anna Terés en su cuenta de Instagram @annarecetasfaciles.
Para preparar este rico entrante vas a necesitar estos ingredientes:
En primer lugar, tienes que picar la cebolla a trocitos pequeños. Mientras lo haces, pon aceite de oliva en una sartén y deja que se vaya calentando. Cuando tengas la cebolla, incorpórala a la sartén con una pizca de sal y ve removiendo.
Cuando se empiece a dorar, añade la carne de una pechuga de pollo picada. Para que quede bien picada, pide en la tienda que la pasen por la máquina de picar. Remueve un poco más y déjala cocinar junto con la cebolla.
Mientras tanto, coge los champiñones y córtalos también picados, "tan pequeñitos como podamos", nos sugiere Anna. A continuación, ponlos en la sartén, añade otra pizca de sal y una pizca de pimienta negra y déjalos reducir.
Pasados unos minutos, verás que han perdido su volumen. Pues bien, es el momento de echar dos cucharadas de harina. Déjala tostar para después verter 200 ml de leche. No dejes de remover, ya que así se integran bien todos los ingredientes y queda como una masa perfecta.
Lo siguiente ya es rellenar los volovanes (Anna recomienda llenarlos cuanto más mejor) y echar un poco de queso rallado por encima de cada uno de ellos. Por último, llévalos al horno a 200 °C (con calor arriba y abajo) durante 10 minutos o hasta que el queso esté fundido.
¡Listos para servir y disfrutar!
Volován es la adaptación al castellano de la palabra francesa "vol-au-vent". La invención de esta masa de hojaldre circular y hueca se debe a Marie-Antoine Carême, un chef y pastelero francés que tuvo la genial idea de rellenarla para hacerla más apetitosa.
Según se dice, le puso este nombre después de una divertida anécdota. Cuando el hojaldre estaba en el horno, uno de los ayudantes de Carême vio que la masa empezaba a subir, a lo que exclamó "Antoine, elle vole au vent!", es decir, "¡Antoine, sale volando!".
Cabe decir que la expresión "gâteau vole-au-vent" ya se encontraba en el "Dictionnaire des alimens, vins et liqueurs" (Diccionario de los alimentos, vinos y licores), del chef M. C. D., publicado el año 1750, esto es, antes de que Carême naciera en París en 1783.