HABER PILLADO UNAS CUANTAS NO SIGNIFICA QUE SEPAS DE QUÉ VA EL ASUNTO
Estas Navidades ha circulado el vino como si fuese agua y tienes la sensación de vivir en una sensación de semiembriaguez permanente que no sabes si te fascina o te mata. Estás borrachín, sí, pero, ¿sabes exactamente qué está pasando en tu cerebro? ¿Dominas la teoría tan bien como la práctica? Con este sencillo test de diez preguntas, que debes contestar con verdadero o falso, sabrás si estamos ante un auténtico cum laude en cogorzas. ¿Juegas?
1- Las personas inteligentes tienden a beber demasiado.
VERDADERO
Desde Hemingway a Chhurchill o genios como Van Gogh o Gauguin (¿entraría en este apartado Ortega Cano?) tendían a beber en exceso simplemente porque eran mucho más inteligentes que el resto. Numerosos estudios han confirmado que las personas con una inteligencia superior tienden a tener más dificultades para establecer lazos con el resto, menos brillantes, y que el alcohol les resulta de gran ayuda en estos menesteres.
2- Si tomo una cucharada de levadura de cerveza antes de beber alcohol no me emborracho.
VERDADERO
Parece ser que esta sustancia acelera la velocidad con que tu cuerpo asimila el alcohol y lo desecha, de manera que aumenta la cantidad que puedes consumir. Tampoco te pases, ojo: la levadura de cerveza tampoco es el antídoto para que puedas beberte hasta el agua de los floreros.
3- Si bebes mucho alcohol puedes olvidar episodios completos de la noche.
VERDADERO
No es un mito. Se llaman apagones, y para ser exactos se producen más que por consumir mucho alcohol por hacerlo muy rápido. Si vas bebiendo a lo largo de la noche, pese a que bebas mucha cantidad, es extraño que te ocurra, pero si lo tuyo es tomar chupitos en tiempo récord es cierto que probablemente al día siguiente no te acuerdes de nada.
4-Beber combate el frío.
FALSO
Es cierto que se produce una vasodilatación y que por ello nos ruborizamos, lo que nos da una sensación de calor momentánea pero no nos calienta de verdad. Así que, amigos rusos, ya nos contaréis de dónde viene lo vuestro con el vodka. Aunque tal vez el siguiente punto explique algo sobre el tema.
5- Se puede estar borracho sin beber alcohol.
VERDADERO
Por la sugestión, claro. Sírvele a alguien un San Francisco contándole que en realidad lleva un chorro de ginebra y probablemente te lo encuentres al rato bailando sobre un tarima con la corbata en la cabeza. Eso mismo, la sugestión, es lo que debía ocurrir a los rusos con el vodka y el frío.
6- Una borrachera mata 10.000 neuronas.
FALSO
Las trastoca un poco durante el rato que estamos ebrios, pero no, no las mata. Al día siguiente su funcionamiento vuelve a la normalidad (siempre en función de las dimensiones de la resaca) y sólo se verán afectadas si las borracheras son continuas.
7- Si no quieres resaca, no mezcles.
VERDADERO.
¿Por qué si lo sabemos perfectamente siempre caemos en lo de las birras antes de la cena, el vino durante y los gin-tonics después?
8- Las bebidas oscuras dejan menos resaca.
FALSO
Durante siglos ha existido la creencia de que el whisky es la bebida que provoca menos resaca, pero es totalmente falso. Las bebidas más oscuras son, precisamente, las que nos regalan unas resacas de órdago, mientras que las más claras tienen efectos mucho más benignos al día siguiente.
9- Cuando alguien ha bebido demasiado hay que darle café con sal.
FALSO
Es una acción absolutamente desaconsejada por los médicos que, no obstante, sigue siendo muy común cuando alguien se ha pasado de la raya empinando el codo. Ni el café va a evitar la somnolencia ni la sal va a conseguir eliminar mediante el vómito ese alcohol que ya está en nuestra sangre desde hace horas. Lo mejor cuando alguien está en estado etílico avanzado es llevarlo al hospital si vemos que la cosa es grave, o no darle ningún líquido, que lo único que harán serán conseguir que nuestro hígado no metabolice el alcohol.
10- Las borracheras tristes dan más resaca.
VERDADERO
Aunque no hay estudios que lo demuestren, ya que es muy difícil medir el impacto de la resaca, parece ser que si pillas un pedo lacrimógeno al día siguiente puede matarte la resaca y que si la cosa va de alegrías los síntomas post-borrachera serán mucho más livianos.
Dicho esto, solo nos queda recomendar a todo el mundo que se beba con moderación y que, finalmente, pese a las risas que nos suele provocar todo lo que tiene que ver con el consumo de alcohol, el alcoholismo es una enfermedad. Dicho esto, no abuséis del alcohol y a pasarlo bien.