10 trucos para hacer tu dieta más saludable: ¡incluidos pasta y postres!

Convertir nuestra alimentación es algo mucho más saludable no es tan difícil. Al final se trata de eliminar costumbres poco sanas, pero también de introducir trucos ingeniosos que no restarán sabor a nuestra comida. Aquí va una decena.

1. Pizza... vegetal. Piensa en la pizza como un 'instrumento' para ponerle vegetales a tutiplén por encima. Las pizza de calabacín, espárrago verde, pimientos de diferentes colores, etc, son realmente deliciosas. Es la oportunidad perfecta para limitar el consumo de bacon, carne picada o pollo a la parrilla. No olvides la albahaca y el orégano, que no aportan calorías y sí dan sabor.

2. Haz la lasaña con placas 'verdes'. Puede ser una de las comidas más satisfactorias, pero también de las que más engordan. Un truco sencillo es sustituir una de cada dos placas de pasta por calabacín finamente loncheado. El resto del relleno puede quedar igual. Apenas notarás que has quitado alguna de las placas intermedias y el sabor será incluso mejor que en el caso de la lasaña normal. También puedes hacer lo mismo con los espaguetis y preparártelos de verduras.

3. Desayuna verduras. Hemos dado un paso más en el tema del desayuno. Ya no es solo que no haya que saltarse la comida del día, sino que se pone en tela de juicio lo que debe y no debe comerse. Por eso, una propuesta es desayunar verduras. No se trata simplemente de desayunar espinacas, sino de combinarlas con un huevo poché, por ejemplo. Merece la pena probar.

4. Mete aguacate en tus postres. ¿De verdad? Pues sí. Hay que tener en cuenta que, aunque su color verde nos despiste, el aguacate es una grasa que puede sustituir de manera fenomenal a la mantequilla, por ejemplo. Hay recetas en las que funciona de manera increíble, aportando sabor y grasas saludables, como es el caso del brownie. No te lo crees, ¿prueba?

5. Prepara helados en casa con frutas. Si en cuanto empieza a apretar el calor no puedes pasar sin un heladito, prepara un cambio este año. En lugar de comprarlos en el supermercado, prepáralos en casa simplemente mezclando agua con frutas y congelándolas. Hay combinaciones francamente deliciosas como cereza con melón o plátano con fresa. No te arrepentirás.

6. Apuesta por el pan, pero siempre integral. Si los hidratos de carbono son lo tuyo y no puedes pasar sin pan, hazte un favor y apuesta por opciones integrales que te ayudarán en tu consumo de fibra. Se trata simplemente de estar atentoy preguntar, ya que muchas veces hay barras 'integrales' que, en realidad lo son de mezcla de harinas y en las que lo integral supone una sola parte.

7. Apuesta por las pasas. Fibras y antioxidantes son los poderes de estas pequeñas frutas que suelen pasar desapercibidas pero que pueden hacer de cualquier picoteo una versión más saludable. Tenlas siempre a mano para añadirlas a yogur, por ejemplo, y ahorrarte el azúcar.

8. Hazte hamburguesas y perritos más saludables. No todo tiene por qué ser queso y bacon a la hora de poner 'toppings' a tus hamburguesas y perritos. Entre las opciones que pueden ayudarte a cuidarte están tomate o zanahoria rallada, un rabanito cortado en finas lonchas -que aportará además un toque crunchy-, champiñones, el sempiterno aguacate o cualquier otra cosa que se te ocurra.

9. Cambia el pan por lechuga. Los wraps vegetales están muy de moda. Cada vez es más común ver como se sustituye el pan blanco por una hoja de lechuga romana en hamburguesas o en tacos mexicanos. Permite ahorrarse la mitad de las calorías, aproximadamente.

10. Bocadillos vegetales: ¡háztelos con berenjena! En muchas ocasiones, nos cuesta renunciar al embutido porque rellenar un sandwich o un bocadillo únicamente con verduras se nos queda corto. Bien, pues prueba esto: corta berenjena y déjala salar para que suelte todo el agua. A continuación, hornéala hasta que quede bien hecha y bien crujiente Salpimenta y disfruta no echarás de menos el jamón york.