COMO SI FUERA UNA CARTA DE RESTAURANTE

El truco para organizar los menús semanales

Hay momentos en los que no se nos ocurren muchas ideas para cocinar o para no repetir platos que ya hemos hecho en días anteriores. Con tal de organizar los menús en tu casa, te traemos este consejo de lo más útil.

Muchas veces, a la hora de comer y de cenar nos plantamos delante de la nevera, la abrimos y estamos un buen rato pensando qué podemos cocinar. Para esos días en los que las ideas nos han dejado en la estacada, este consejo que os presentamos a continuación puede ser de gran utilidad y también servirá para mejorar la organización de los menús. Además, será un gran aliado para pensar qué cocinaremos para el táper del día siguiente para llevar a la oficina.

Hacer un listado de platos

Ana Pemán es nutricionista y es quien ha compartido este truco con un vídeo en su cuenta de Instagram @anapemannutricio.

La experta tiene la teoría que en cada casa se cocinan alrededor de unos 20 o 30 platos, que son los habituales y los que se hacen con regularidad. "Todo lo demás son momentos puntuales y especiales o imaginaciones nuevas que se nos ocurren", apunta.

Para tener una buena organización de los menús que vamos a hacer en casa, el primer paso consiste en elaborar un listado de todos aquellos platos que ya sabemos cocinar, que los hacemos casi en un abrir y cerrar de ojos y que no necesitamos mirar la receta.

La nutricionista explica que esta lista tiene que contener todo tipo de platos: "ligeros, tradicionales, muy elaborados, fáciles, difíciles...". Todos aquellos que tengas en tu recetario particular y si algún día pruebas de hacer algo que gusta en casa, pues también lo añades a la lista. El resultado de esto será una extensa carta, como si fuera la de un restaurante, a la que podrás acudir si en algún momento no sabes qué cocinar.

¿Cómo se elabora el listado de platos caseros?

Ana lo divide en diez categorías, que son las siguientes.

- Cremas y sopas. Dentro de esta categoría podemos encontrar platos como el gazpacho, la sopa de coliflor, la crema de calabaza y el puré de patatas.

- Legumbres. Lentejas con jamón, ensalada de legumbres y alubias con chorizo son algunos de los platos incluidos en este grupo.

- Guisos y platos con patata. Esta categoría incluye el marmitako, la musaka, las patatas a la riojana y la patata rellena de pisto.

- Arroces. Incluye el arroz blanco, el arroz con tomate o a la cubana y la paella.

- Pasta. Podemos encontrar los clásicos espaguetis al pesto hasta una lasaña de atún, macarrones con roquefort y cherrys y la ensalada de pasta con salsa pesto y tomates cherry.

- Carne y pescado. De lo primero, carrillada al vino tinto, pollo relleno de jamón y queso y pavo trufado. De lo segundo, dorada a la sal, pez espada con salsa teriyaki y lubina al horno con base de patata y pimientos.

- Ensaladas y verduras. Ensalada de judías verdes, patatas, atún y huevo duro, coliflor rehogada al ajo-pimentón, escalivada y espinacas a la crema son algunas de las sugerencias.

- Guarniciones de un solo ingrediente. Espárragos verdes a la plancha, endivias y bastones de zanahoria. Sin complicaciones.

- Huevos. Tortillas como más te gusten (por ejemplo, de calabacín, patata y cebolla; o de espinacas), revueltos (con espárragos verdes y jamón, setas y gambas; y con ajetes) y huevo poché con trufa.

- Cenas divertidas. Aquí se incluyen elaboraciones como las fajitas de pollo, el hummus con crudités y el wok de verduras con fideos de arroz y gambas.

Todo esto son ideas de cómo hacer la lista. Ahora, ¡te toca a ti!