GRACIAS A ELLAS, TUS PLATOS DEJARÁN DE SER ABURRIDOS
Un plato puede dejar automáticamente de ser soso o aburrido si lo aderezas con alguna salsa. Son sencillas de hacer, requieren pocos ingredientes y pueden alegrar desde un plato de carne a uno de pescado, unas verduras o una ensalada fría. Dime qué plato vas a cocinar y te diré cuál de estas tres salsas le va a dar alegría.
PARA PESCADOS: salsa de almendras
Ingredientes:
- 1/2 limón.
- 2 cucharadas soperas de vino blanco.
- 150 g de almendras tostadas y cortadas en láminas finas.
- 80 g de mantequilla.
- Un chorrito de aceite.
Elaboración:
Poner en una cazuela el limón, el aceite y la mantequilla. Remueve con una cuchara de madera hasta que la mezcla crezca y añade las almendras y el vino. Cuece a fuego lento hasta que el vino se evapore: quedará una mezcla espesa pero suelta, ideal para acompañar pescados como la trucha o el salmón.
PARA ENSALADAS: vinagreta con mostaza
Ingredientes:
- 4 cucharadas de aceite de oliva de 1 grado.
- 2 cucharadas de vinagre.
- 1/2 cucharadita pequeña de mostaza.
- 1 cucharada de vino blanco suave.
- 1 ramito de menta.
Elaboración:
Bate todos los ingredientes juntos y añádelos a tu ensalada de manera que quede repartida uniformemente. Es perfecta para ensaladas con quesos azules potentes, entre otras.
PARA CARNES: salsa Roquefort con yogur
Ingredientes:
- 1 yogur.
- 50 g de queso azul.
- 1 chorro de vinagre.
Elaboración:
En un bol ponemos el yogur, el queso y el vinagre y se mezclan con un mortero hasta que quede una salsa muy fina.