Expertos la han elegido como la mejor

Todo lo que necesitas saber sobre la dieta DASH, la número 1 en Estados Unidos

La dieta DASH, pensada inicialmente como un arma contra la hipertensión, se ha posicionado como la mejor dieta, según un grupo de expertos estadounidenses. Frutas, verduras, pocos hidratos de carbono y nada de grasa son sus armas.

Los vegetales y las frutas están en la base de esta dieta, que ha seducido a Estados Unidos.Morguefile

Por quinto año consecutivo (y tiene mérito en un mundo tan cambiante como el nuestro), la dieta DASH ha sido elegida como la mejor según el panel de expertos reunidos por U.S. News & World Report. El tema no deja de ser curioso porque, pese a que para los norteamericanos es muy conocida, no lo es tanto para nosotros. Vamos a acercarte esta dieta en siete puntos:

1. La dieta DASH fue desarrollada para controlar la hipertensión sin medicación y fue fruto de una investigación desarrollada por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos. Así que, ojito, porque está respaldada por las autoridades sanitarias y es el resultado de un trabajo serio. Aunque eso sí, no estaba pensada para perder peso.

2. Frutas, vegetales, lácteos desnatados, nueces, judías y semillas conforman la base de esta dieta y, sí, de estos alimentos se puede uno poner hasta arriba si lo desea. También se ponen a raya los hidratos de carbono y se apuesta por las proteínas.

3. En cuanto al pescado, sí que está permitido. En cuanto a la carne, se recomienda el consumo de aquellas menos grasas y se hace especial hincapié en aves.

4. En los libros publicados hasta ahora se pone el énfasis en cómo controlar la "montaña rusa" del azúcar en la sangre que lleva a esa necesidad imperiosa de picar entre horas. Para estos momentos fija alternativas a la barra de chocolate como frutos secos (sin freír, claro está) o frutas.

5. Nada de reducir el número de comidas con la falsa esperanza de poder así meter menos cantidad en la barriga. El objetivo no es otro que tener todo el día lleno de pequeñas ingestas (sanas, eso sí).

6. Veto al alcohol. No solo contribuye a incrementar la presión arterial, sino que puede conducir a estimular el apetito y, además, no aporta nutrientes. Cualquier bebida es preferible antes, desde (obviamente) agua hasta zumos naturales, café o té.

7. Dos menús tipo. Para que os hagais una idea, aquí van dos propuestas que ayudan a ver en qué consiste esta dieta.

La primera corresponde a la primera fase, en la que se busca perder peso de manera más rápida:

Desayuno

Tortilla francesa
Zumo de tomate

Snack de media mañana

Un quesito en porciones light con tomatitos cherry

Almuerzo

Dos rollos en hoja de lechuga de pechuga de pavo y queso bajo en calorías
Ensalada de col
Edamame
Gelatina sin azúcar

Snack de la tarde

Un quesito en porciones light con zanahorias baby

Snack de antes de la cena

Guacamole con tiras de pimiento (en crudo)

Cena

Pechuga de pavo asada, con zanahoria y cebolla salteada y ensalada con salsa vinagreta

 

La segunda de las propuestas ya no pretende buscar la pérdida de peso, sino fijar un estándar de cocina saludable:

Desayuno

Chocolate caliente, huevos revueltos, zumo de arándanos y fresas

Snack de media mañana

Un yogur light con almendras crudas

Almuerzo

Ensalada de atún en pan de pita con guarnición de pimiento rojo y tomate
Gelatina sin azúcar

Snack de la tarde

Mandarina y un puñado de anacardos

Snack de antes de la cena

Un puñado de cacahuetes

Cena

Espaguetis de calabaza con salsa de carne, con ensalada de lechuga con vinagreya
Polo de chocolate light