MUY FÁCIL DE HACER
¿Te gusta dipear? Es una forma ideal de disfrutar de un aperitivo a solas o en compañía. Y lo mejor de todo es que hay una amplia variedad de opciones para esta experiencia y hay de muy saludables. En el artículo de hoy te traemos un snack que puedes hacer en tu casa que es muy rico y antiinflamatorio.
Quien dijo que dipear no era sano, estaba muy equivocado. Los dips más populares son el guacamole o el hummus y normalmente la gente lo acompaña con nachos o picos de pan. Pero se puede ser muy original y encontrar opciones más saludables y que sean igual de buenas. Un ejemplo es el snack antiinflamatorio que os traemos en el artículo de hoy.
Se trata de unos crackers que puedes hacer tú mismo en casa muy fácilmente siguiendo este Reel de @lasmariacocinillas. Es rápido de hacer y un snack perfecto para tener a mano y acompañar muchas de tus elaboraciones. Además, es muy saciante y tiene un alto poder antiinflamatorio al llevar ingredientes muy saludables para nuestro cuerpo como las semillas de chía o de girasol.
1. Coge un bol y añádele el agua, las semillas de chía, girasol y calabaza y las dos especias. Remuévelo todo muy bien y déjalo reposar entre media hora y una hora.
2. En una bandeja de horno, extiende un papel de hornear. Añade la masa en la bandeja, sobre el papel, y extiéndela muy bien con ayuda de algún utensilio o las manos. Debe quedar liso y uniforme, de esta forma, será más fácil hornear y formar los crackers.
3. Pon tu bandeja al horno a 180 grados, unos 35 minutos. La masa debe quedar dorada y cocida, puedes dejarla más tiempo si te gusta más o menos tostado.
4. Pasados los minutos, deja la bandeja con la masa enfriar. Después, corta con un cuchillo la masa para que te queden cortes rectangulares y disfrutalos con cualquier salsa.
5. Como verás, te sobrarán muchos crackers. ¡No pasa nada! Puedes guardar los restantes en un tarro hermético cerrado en la despensa.
Este snack lleva semillas que son muy beneficiosas para nuestra salud. Por una parte, las semillas de chía son muy ricas en ácidos grasos omega-3, un tipo de grasa que fortalece las neuronas, ayudando también a optimizar nuestra salud cardiovascular. También reduce el colesterol.
Por otra parte, las semillas de calabaza son ricas en vitamina E y antioxidantes que combaten las enfermedades. Refuerza nuestro sistema inmunológico. Debido a que contienen magnesio, potasio y ácidos grasos saludables, se ha demostrado que mejoran la salud del corazón y ayudan a reducir el riesgo de enfermedad coronaria.
Finalmente, las semillas de girasol se caracterizan por ser ricas en vitamina E, lo que les confieren diversas propiedades. Esta vitamina es un potente antioxidante, lo que ayuda a mantener sanas las células y con ello evitar diversas enfermedades. Las semillas de girasol también son ricas en minerales, como el calcio, cobre, fósforo y selenio, que promueven la salud ósea, entre muchas otras funciones vitales del cuerpo.