El molusco y sus beneficios para la salud

Seis buenos motivos para incluir los mejillones en tu dieta

¿Conoces todos los beneficios de los mejillones? Este molusco puede hacer por ti más de lo que piensas. Descubre sus beneficios.

El beneficio de los mejillonesCocinatis

Por lo general, concebimos a los pescados y al marisco como alimentos beneficiosos para la salud, pero tendemos a excluir de esta categoría a los moluscos, como los berberechos, las almejas o los mejillones, que también lo son.

En concreto, los mejillones son uno de los alimentos más naturales y orgánicos que existen, y tienen un alto contenido en vitaminas, aminoácidos y minerales, por lo que, al contrario de lo que se podría pensar, son muy beneficiosos para la salud. Los mejillones son considerados por muchos como auténticas joyas gastronómicas, y por buenas razones. Estas son algunas de las propiedades de los mejillones que seguramente no conocías. ¿Necesitas más razones para incluirlos en tu dieta?

Ayudan a reparar tejidos

Los mejillones son muy ricos en proteínas, tanto o igual que la carne. De hecho, una taza de mejillones contiene casi 18 gramos de proteína, que es el 30 % de la cantidad diaria recomendada para una persona. Las proteínas ayudan a reparar tejidos dañados, a producir hormonas y a mantener la masa muscular en un buen estado.

Son antiinflamatorios

Los mejillones tienen más ácidos grasos omega-3 que cualquier otro marisco y mucho más que cualquier otra carne. Esta sustancia tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que puede ayudar a combatir dolores relacionados con las articulaciones o los huesos.

Combaten la depresión

100 gramos de mejillones contienen 8 ug. de vitamina B12, una sustancia que interviene en numerosas funciones corporales y psicológicas. Diversos estudios relacionan su consumo con una mejora del estado del ánimo y también de algunas enfermedades mentales, como la depresión.

Mejoran el sistema inmunológico

Los mejillones estimulan la producción de glóbulos blancos debido a su contenido en vitamina A, por lo que indirectamente, contribuyen a restaurar huesos, a mantener la salud de las células y a reforzar el sistema de defensa del organismo.

Controlan la presión arterial

Una taza de mejillones contiene 429 microgramos de sodio, un mineral que el cuerpo necesita para funcionar correctamente, para controlar la presión arterial y el volumen sanguíneo.

Mejoran el estado de la piel y los huesos

La vitamina C presente en estos moluscos participa en la reparación y mantenimiento de cartílagos, huesos y tendones. Así mismo, este nutriente antioxidante es esencial para mantener un buen estado de la piel.

¿Cómo incluir mejillones en tu dieta?

Los mejillones habitan tanto en agua salada como en agua dulce y su consumo es muy común en los países europeos mediterráneos. En el mercado podemos encontrarlos como marisco fresco, pero también en lata, en platos precocinados o incluso congelados. Los mejillones son muy agradecidos y pueden prepararse de muchas formas: cocidos, ahumados, fritos, a la parrilla, al vapor…

Elaborados al vapor, con una vinagreta de verduras, o en escabeche, con una salsa de vino blanco, se convierten en un aperitivo sabroso, bajo en calorías y grasas y, especialmente, muy nutritivo. Si quieres utilizarlos en recetas más elaboradas, puedes incluirlos en ensaladas, utilizarlos para hacer cremas o servirlos con arroz o pasta. ¡Combinan muy bien!

Plato de mejillones | Cocinatis