LLENA DE SABOR
Elabora un suculento sofrito para tus platos en tan solo cinco pasos.
Conseguir elaboraciones con un sabor intenso a veces nos resulta difícil, por lo que acabamos agregando grandes cantidades de especias para potenciarlo. Para que tus platos se conviertan en auténticos manjares, lo fundamental es partir de una buena base, por lo que un buen sofrito puede ser la clave. Se trata de una de las bases más usadas y personales, ya que cada uno la cocina a su manera, pero si quieres triunfar seguro, no puedes perderte esta alternativa.
Un sofrito delicioso
Como cualquier otro sofrito casero, los ingredientes que se requieren son de lo más naturales. Lejos de las salsas fritas de bote llenas de azúcares y aditivos, la receta está cargada de vegetales.
Raquel es la encargada de la cuenta de Instagram @blw_receptes, la persona que se ha currado la elaboración. Aunque sus recetas se basan en el método Baby-led Weaning, los platos que propone no solo son aptos para los más peques, sino que se adaptan a toda la familia, ya que consigue comidas deliciosas sin incorporar azúcares ni usar demasiada sal.
El vegetal desconocido
La principal peculiaridad de esta salsa es que usamos ñora, un producto, para algunos, invisible, pero que cuando lo pruebes se convertirá en un indispensable para tu cocina. Se trata de una variedad de pimiento, redondo y de pequeñas dimensiones, con un sabor dulce y a la vez, picante, cargado de intensidad.
Aunque no lo creas, es un producto muy usado en la gastronomía de la península, sobre todo para elaborar arroces, salsas y guisos. Se suelen vender secas, aunque para extraer su carne tan solo deben hidratarse en agua caliente. También se pueden triturar y usarlas como especia en polvo.
Cómo elaborar la salsa de tomate con ñora
Ingredientes:
Elaboración:
1. Corta por la mitad las cebollas y las cabezas de ajo. Limpia los tomates y pon todas las verduras en una bandeja de horno, con aceite, sal y pimienta. Cocínalas hasta que se doren.
2. Pela las cebollas y córtalas a trozos.
3. En una olla, agrega los ajos hasta que reduzcan cuatro veces su volumen y su color cambie a marrón. Añade la cebolla.
4. Pela los tomates y vacía su interior, retirando las semillas. Córtalos a trozos y añádelos a la cebolla.
5. Añade uvas pasas y una cucharada con abundante pasta de ñora. Deja reducir durante un buen rato la mezcla y retira las pasas.
Es importante que remuevas mucho y muy bien todos los ingredientes para que no se peguen. De lo contrario, el chamuscado va a provocar que tu plato quede amargo.
Base perfecta
Cuando pruebes su sabor te fascinará, por lo que vas a querer usar el sofrito como base de todas tus elaboraciones. Para evitar tener que hacer la receta cada dos por tres, puedes optar por seguir los pasos de Raquel: congelar la salsa en pequeños recipientes. De esta forma, podrás disfrutarla siempre que te apetezca, ya que con las medidas indicadas ¡Tendrás para unos 20 usos!
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