Chocolate en esculturas
Amaury Guinchon, más conocido como `el arquitecto del chocolate´, crea postres imposibles utilizando el chocolate como principal ingrediente.
Amaury Guinchon es considerado como uno de los mejores pasteleros del mundo, gracias a esculturas imposibles que realiza en su taller utilizando únicamente el chocolate como el ingrediente principal. En algunos diseños incluye además pequeños trozos de oro y plata que le permiten destacar ciertos detalles. Por ejemplo, en una tarta que elaboró con aspecto de reloj, utilizó el oro para hacer las agujas.
El cocinero emplea el chocolate y lo moldea como si de arcilla se tratase. El talento de este chef es increíble y su destreza para realizar las esculturas es inagotable, ya que ha realizado desde discos de vinilo, sillas de salón o bolsos de las marcas más caras, hasta cabezas de zombies, ojos o conejos.
Amaury Guinchon utiliza sus cuentas en redes sociales, principalmente Facebook e Instagram, para compartir sus postres y el complicado proceso de elaboración que conllevan. Algunos de sus trabajos más complejos son, por ejemplo, pequeños árboles de navidad en los que cuida hasta el último detalle, incluyendo las bolas y hasta la estrella que corona el abeto.
Otra de sus elaboraciones es un bonsái, el cual se encuentra en su tiesto correspondiente relleno de falsa arena, hechas ambas con chocolate. Sin embargo, es el calamar a escala real unos de sus trabajamos más complicados entre todas sus publicaciones, debido al tamaño y a los colores que se han utilizado. Siguiendo con postres inspirados en el mundo marino, Guinchon realizó también una escultura de Poseidón, el dios del mar, en la que no podía faltar su característico tridente.
Toda una vida dedicada a la repostería
El chef de origen francés despertó su curiosidad por los postres cuando con tan sólo 8 años ayudaba a su tía en la cocina a hornear pasteles. Sin embargo, no comenzó su carrera hasta que cumplió 16 años. Realizó sus estudios en Suiza y posteriormente se trasladó a su país de origen, Francia, donde continúo con su carrera y consolidó su relación con los postres.
Actualmente posee dos tiendas, que cuentan con más de 100 empleados que realizan miles de pasteles todos los días. Además, comenzó su último proyecto en San Diego, California consiste en clases para que los clientes puedan crear sus propios postres, helados, tartas o batidos con una gran variedad de productos e ideas innovadoras.