SOLO TIENES QUE ABRIR LA NEVERA (Y EL MICROONDAS)
Más allá de la comida para llevar, de la clásica tortilla francesa, la pizza congelada o el típico bocata, podemos prepararnos comidas buenas y sabrosas en el microondas en menos de cinco minutos. Basta ya de utilizar este electrodoméstico solo para descongelar y calentar, pues los microondas, incluso los que tienen menos prestaciones, sirven también para cocinar platos asombrosos. Aquí cinco trucos para sacarle partido y comer bien de forma rápida y facilísima.
1- Un mugcake. Existen numerosas recetas para prepararte un pastelillo en el microondas, que puede servir de merienda en esos días que estás en casa y el cuerpo te pide algo dulce. Hay múltiples recetas, y casi todas pueden hacerse con ingredientes que ya tienes en casa: galletas, Cola Cao, harina, azúcar y poco más. Algunos llevan mantequilla, otros chocolate para fundir, y todos tienen un denominador común: se pueden elaborar en un plis plas en el microondas, basta con poner todos los ingredientes en una taza y meterla en el microondas a máxima potencia durante un periodo de tiempo que oscila entre 10 y 15 minutos. En Cocinatis somos fans de estas meriendas resultonas y fáciles, que al fin se elaboran con ingredientes caseros, sin aditivos, y las hemos puesto en práctica en numerosas ocasiones: con Cola Cao y galletas, de chocolate... y muchos más.
2- Patatas gratinadas. Nada más fácil que prepararte unas buenas patatitas al microondas en cualquier momento, y huir así de las patatas fritas (mucho más calóricas, menos saludables y con toneladas de aceite) o de la bolsa de patatas chips. Vamos a tenerlas listas en pocos minutos, y van a ser una guarnición ideal para cualquier plato que te hayas sacado de la manga, desde una hamburguesa a un pescado, que puedes hacer a la plancha vuelta y vuelta. Basta con meter las patatas cortadas en rodajas en una fuente en el microondas con un chorro de aceite de oliva virgen extra y unas hierbas al gusto. Para darles un toque espectacular, un minuto antes de que estén listas puedes abrir el microondas y añadir queso rallado, para que se gratinen. El resultado es un espectáculo.
3- Pasta. Un buen plato de pasta siempre funciona, y podemos improvisar una salsa con lo que tengamos en la nevera. Basta con introducir un recipiente con agua y espaguetis, introducirlo en el microondas a toda potencia durante cinco minutos y ya estarán listos. La salsa puede improvisarse: siempre podemos meterlos un rato en la nevera y prepararnos una ensalada con unos tomates, maíz, queso fresco y un buen aceite de oliva virgen extra. También podemos comerla caliente, con un chorro de buen aceite de oliva y parmesano rallado. O hacer unos espaguetis all'aglio e olio, calentando el aceite en la sartén con un poco de ajo y añadiendo la pasta, para acabar con un toque de queso rallado. Por otra parte, los fans de la pasta cuatro quesos tendrán en el microondas su mejor aliado. Una vez calentada la pasta, se pueden derretir los quesos en este aparato e incorporarlos a la pasta que hayamos elegido. Tal vez no sean como los de aquella 'trattoria' de Roma, pero te van a sacar del apuro.
4- Flan de huevo. La repostería al microondas es todo un mundo por explorar, y a menudo no le sacamos todo el partido que se merece. Antes de comprar esos polvos insufribles que nos venden como flan, merece la pena perder dos minutos de nuestro tiempo en elaborarlo al microondas. Una vez bordemos el flan de huevo estándar, podremos prepararlos de coco, vainilla, de queso, de manzana...
5- Tortilla de patatas. No solo te la puedes preparar en el microondas, es que además puedes hacerla ¡en tacita! Sin ensuciar, sin liarla parda en los fogones y con todo el sabor de las buenas tortillas de patatas.