TRUCO DE COCINA
A la hora de escurrir la pasta lo habitual es verter la olla sobre un escurridor en el fregadero. Sin embargo, hay una forma mucho más cómoda de hacerlo.
A la hora de preparar un plato de pasta, sea cual sea el tipo, tras cocerla en el agua lo habitual es escurrir el alimento antes de añadirle las salsas o guarniciones que lo acompañarán. Normalmente a la hora de escurrir la pasta se suele hacer colocando un escurridor dentro del fregadero y a continuación verter el agua y la pasta sobre él para eliminar el líquido elemento. De esta manera se conserva la comida y se evita que las salsas queden aguadas. Después se vuelve a verter el alimento más "seco" en la olla para cocinarlo junto a la salsa o guarnición.
No obstante, existe un truco mucho más sencillo para verter el agua sobrante al cocinar la pasta sin siquiera sacar la comida de la olla.
Lo que realmente debemos de hacer, es posicionar el escurridor encima de la olla en la que se encuentra la pasta, con la parte cóncava hacia el interior de nuestro recipiente. De esta manera al escurrir la pasta, se quede dentro de la olla que utilicemos y no en el escurridor. Podemos verter el agua sobre el fregadero, con especial atención, para sujetar firmemente el escurridor y la olla y sobre todo de no quemarte, debido a la temperatura a la que se encuentra el agua.
Después lo único que tienes que hacer, es volver a colocar la olla sobre el fuego y retirar el escurridor para poder acceder a la pasta y poder cocinarla como queramos. Eso sí hay que recordar que el escurridor debe tener el mismo diámetro que la olla, para que no se desperdicie o se escape la pasta por alguno de los lados y para una mejor sujeción.