Así es como te ayuda

Hay un fruto seco que te ayuda a controlar tu peso... y seguro que no es el que te esperas

Un puñadito al día de estos frutos secos te puede hacer muchísimo bien. Estas son las razones que lo convierten en un alimento perfecto para no ganar peso

PistachosAgencias

Todos estamos al tanto de que los frutos secos son buenos. A diario, nutricionistas de todo el mundo aconsejan comer un puñadito de almendras o nueces para desterrar otros picoteos menos sanos y disfrutar de todas sus cualidades. Pues bien, hay un fruto seco del que a veces nos olvidamos y que puede ser muy beneficioso para nuestra salud: hablamos del pistacho.

El pistacho también es rico en fibra. | American Pistachio Growers

Comer pistachos entre horas, es una práctica altamente saludable y saciante que favorece la concentración y el rendimiento laboral. Mientras una ración de 49 unidades de pistachos correspondiente a 28 gramos contiene 164 kilocalorías, el mismo peso en nueces equivale a 195 kilocalorías; 171 kilocalorías en el caso de los anacardos; 176 kilocalorías para las almendras y 191 kilocalorías en las avellanas. Los estudios demuestran que el pistacho con cáscara contribuiría a reducir gradualmente el peso, al saciar el apetito durante un espacio más prolongado de tiempo; y, al acelerar el metabolismo para que el cuerpo queme una mayor cantidad de grasas. Además, el pistacho es rico en fibra (2,9 gramos por ración) y una fuente de proteínas (5,9 gramos por ración). Aquí van los beneficios del pistacho como alimento orientado a perder peso.

Ayuda a disminuir el índice de masa corporal. Un estudio científico demuestra que el consumo regular de raciones controladas de pistachos como aperitivo, puede disminuir el índice de masa corporal en dietas hipocalóricas.

El pistacho, muy efectivo para el control de peso. | American Pistachio Growers

La cáscara ayuda a reducir las calorías ingeridas. Una ventaja del pistacho es la cáscara. Una investigación corrobora la hipótesis que afirma que la cáscara contribuye a reducir la ingesta calórica. Esto se debe a que el proceso de descascarar este fruto seco ralentiza la ingesta y la visualización de las cáscaras vacías sirve de señal al consumidor, que toma consciencia de la cantidad que ya se ha comido.

Aumenta la sensación de saciedad. Las evidencias científicas ratifican que todos los frutos secos ayudan a sentirse saciado, a suprimir el hambre y a reducir la necesidad de comer en exceso por su contenido en fibra. Además, una investigación afirma que se estima que entre el 55-75% de la energía aportada por los frutos secos es compensada por un menor consumo de energía posterior.

Contribuye a reducir la obesidad. Los resultados de dos estudios publicados en 2012 y 2013 sobre el consumo de frutos secos, incluyendo los pistachos, sugieren que pueden contribuir a la prevención de la obesidad.