¡No más granos!
El acné se considera un problema de la adolescencia y, sin embargo, hay muchos adultos que lo sufren. Puede ser debido al estrés, a una falta de higiene de la cara (o del móvil, ¡ojo!), pero en la mayoría de casos se debe a la alimentación.
Hay algunos alimentos que provocan acné y otros que lo previenen. Nuestra piel es el órgano más extendido de nuestro cuerpo y es justo en ella donde se reflejan eventuales problemas en la alimentación.
Por ejemplo, la falta de agua hace que nuestra piel se seque y la cicatrización sea más difícil. Si sufres de acné, esto te interesa. Beber alrededor de dos litros de agua al día hará que nuestra piel sane más rápido, evitando o disminuyendo las cicatrices debidas a los granos.
Al igual que el agua, el té verde puede ayudarnos mucho. Su acción antinflamatoria reduce la los granos y de hecho se puede tomar en infusión o aplicar con compresas directamente en la zona afectada.
Todos los alimentos ricos en omega-3 nos ayudan a cuidar de nuestra piel. El consumo de nueces y los frutos secos en general es especialmente indicado para combatir los granos. Puedes incluirlas en tu desayuno o bien consumirlas a media mañana o a media tarde como snack saludable.
Por la misma razón, deberías consumir más pescado azul, también rico en omega-3. Fundamentales para la luminosidad de la piel, favorecen su elasticidad y regulan la producción de sebo. Si asocias el consumo de pescado azul con una reducción de la ingesta de alimentos que provocan picos glucémicos, como pasteles o chucherías. Notarás la diferencia en poco tiempo.
Los cereales integrales son otros grandes aliados en la lucha contra el acné. Bajar el consumo de cereales refinados y decantarse por su equivalente integral influye directamente sobre la reducción del acné, ya que estaremos bajando la carga glucémica de nuestra alimentación.
Los alimentos ricos en zinc de son otros aliados imprescindibles a la hora de empezar nuestra lucha contra el acné. Las semillas de calabaza, la carne de cordero, de vacuno o de cerdo, son alimentos con un contenido de zinc muy alto.
Según algunos estudios, el consumo de leche podría interferir con la absorción de zinc, especialmente en el caso de la leche desnatada. Si estás intentando que los granos desaparezcan, deberías reducir el consumo de leche. Sin embargo, hay algunos derivados de la leche que sí ayudan a disminuir los granos: yogur, kéfir y todos los alimentos probióticos son, en general, fundamentales, ya que aumentan las bacterias en el intestino.
Por último, merece la pena desterrar uno de los mitos más extendidos sobre el acné: la ingesta de chocolate no está directamente ligada con la formación de granos. Claro está que estamos hablando de chocolate de calidad. El chocolate negro, de hecho, contiene antioxidantes muy beneficiosos para la piel: el problema está en consumir chocolates con leche y con azúcares añadidos.