MANOS A LA MASA… O NO
¿Te apetece hacer pan en casa, pero todavía no has encontrado una receta sencilla que te permita disfrutar de todo el sabor de lo casero de forma fácil? En este artículo te traemos una receta de pan que no necesita que te arremangues para amasar y que se convertirá en una de tus favoritas.
Hacer pan en casa es una tarea gratificante y saludable que te permite disfrutar de un pan freso, sabroso y nutritivo.
Hacerlo en tu propia cocina te permite elegir tú mismo los ingredientes, algo especialmente útil si tienes alguna alergia o intolerancia alimentaria, si prefieres utilizar harinas integrales o si deseas tener el control absoluto de todos los ingredientes para evitar los aditivos y los conservantes que habitualmente nos encontramos en los panes industriales.
Elaborar tu propio pan se puede convertir en una actividad culinaria de lo más creativa y divertida: puedes experimentar con diferentes ingredientes, formas y técnicas para conseguir panes de lo más originales y, por supuesto, únicos.
Además, cocinar pan casero es una buena manera de ahorrar, sobre todo si compras los ingredientes a granel o en grandes cantidades es más que probable que el resultado final te resulte más económico que comprar pan en la tienda.
En este artículo te traemos una receta de pan casero muy sencilla, tanto que no necesita que te llenes las manos de harina y que amases el pan como en antaño. ¡Atrévete a probarla y disfrutarás de un pan casero, delicioso y fácil de hacer!
Receta de pan casero que no requiere amasar
Ingredientes:
Modo de elaboración:
1. En un tazón grande, mezclamos la harina, la levadura seca y la sal. Agregamos el agua tibia y mezclamos todo con una cuchara de madera o una espátula hasta que la masa esté uniforme.
2. Cubrimos el tazón con papel film y lo dejamos reposar en un lugar cálido y sin corrientes de aire durante al menos 8 horas aproximadamente para que fermente de forma adecuada.
3. Una vez transcurrido este tiempo, cuando la masa ya se ha expandido y ha quedado más ligera y esponjosa, colocamos un recipiente con tapa dentro del horno mientras y precalentamos a 230 º C.
4. Mientras se calienta, Retiramos la masa de la nevera, la extendemos en una superficie plana, previamente enharinada, y doblamos la masa en tercios, como si fuera una carta, y luego doblamos de nuevo con los extremos hacia el centro.
5. Cubrimos la masa con un paño de cocina limpio y la dejamos reposar durante 30 minutos a temperatura ambiente.
6. Una vez que el horno esté caliente, retiramos con mucho cuidado el recipiente que estaba dentro del horno. Espolvoreamos un poco de harina en su interior y vertemos la masa en ella.
7. Cubrimos el recipiente con una tapa y horneamos durante 30 minutos.
8. Pasado ese tiempo, retiramos la tapa y hornea durante otros 10-15 minutos, o hasta que el pan esté dorado.
9. Sacamos el pan del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla.
Qué función del horno utilizo para hacer pan casero
La mejor función del horno para cocer pan es el modo de calor envolvente para que el calor se distribuya de manera uniforme y permita que el pan se cocine de forma integral y se dore adecuadamente.
Algunos hornos también tienen funciones específicas para hornear pan, como el modo de horneado de pan o el modo de cocción al vapor, que también pueden ser útiles para obtener buenos resultados al hacer pan.
No obstante, si tu horno no tiene una amplia configuración y no dispone de función de vapor, siempre puedes colocar un pequeño recipiente con agua para crear vapor.