7 trucos muy resultones
Llega la época más molona del año para los amantes del marisco. Las comidas navideñas son una ocasión perfecta para sorprender a tus invitados con unas formas muy originales de cocinar el marisco.
Y es que, aunque no lo parezca, el marisco es muy versátil. Su sabor suave casa bien con muchos ingredientes y se puede jugar también con las texturas para elaborar platos sorprendentes en muy pocos pasos.
1. ¿Te gustan las gambas salteadas? Puedes exaltar su sabor añadiendo unos puerros troceados y un chorro de cerveza. Simples y muy muy sabrosas.
2. Sal de lo conocido y experimenta. Las brochetas de marisco son perfectas como entrante informal o segundo plato ligero. Un ejemplo podrían ser unas brochetas de calabacín y gambas.
3. Por lo que decíamos de jugar con las texturas, te soplamos una idea de lo más resultona para acompañar cualquier tipo de marisco y añadir un toque crujiente. Corta unas patatas y calabacín en espaguetis y fríelos hasta que estén crujientes. Puedes servir el marisco sobre un lecho de espaguetis de verduras. Será un plato muy bonito de ver, y divertidísimo de comer.
4. Siguiendo con el mismo principio, ¿por qué no probar con unos rollitos de pasta filo rellenos de marisco? Puedes preparar el relleno con los ingredientes que más te gustan. La pasta filo tiene una textura crujiente y ligera con un gusto suave que no cubre el relleno. Es más ligera que el hojaldre y el resultado puede ser realmente sorprendente si te dejas guiar por tu fantasía.
5. ¿Has probado alguna vez una ensalada de marisco? Puedes prepararla según los gustos de tus invitados. Una opción puede ser marisco con tomates cherry y aguacate, la otra con patatas, ajo y perejil. Si quieres sorprender a tus invitados, servir este plato en cestitas de hojaldre le añadirá un toque diferente a una receta muy sencilla.
6. Para una cena ligera pero elegante, puedes servir una crema de verduras y vieiras a la plancha. La crema de verduras pasará de ser un plato de todos los días a un primero de lujo para una noche especial.
7. Y hablando de verduras u hortalizas, una opción es preparar un risotto de calabaza y marisco. Puedes utilizar el marisco que más te gusta o mezclar varios tipos: todos ellos casan perfectamente con el sabor dulce de la calabaza.