Cómo cocinar croquetas y que no queden congeladas por dentro

Al elaborar un plato tan típico y aclamado en la gastronomía española como son las croquetas, lo habitual es que las introduzcamos en la freidora después de haber sido congeladas. No siempre tenemos tiempo suficiente para hacer croquetas caseras, por eso, cuando las preparamos, dejamos varias tandas congeladas para tener en otro momento.

El caso es que tanto si son compradas como si son caseras, si las cocinamos después de que hayan estado en el congelador lo más probable es que al sacarlas de la freidora nos queden congeladas por dentro. Para ello, te enseñamos algunos consejos que evitarán que esto te vuelva a ocurrir.

Así tienes que preparar las croquetas para que tengan la textura perfecta

El motivo por el que las croquetas suelen quedar congeladas por dentro es porque al meterlas en la freidora el aceite está a una temperatura demasiado elevada provocando que se cocine el rebozado y no el interior.

Otro problema que puede suceder es que se nos abran las croquetas. Cuando esto pasa es porque el aceite se enfría mucho por el contraste de meter la croqueta congelada. Por eso lo recomendable es dejarlas a temperatura ambiente media hora antes de empezar a cocinarlas para que luego no estén tan frías.

Entonces, ¿cuál es la temperatura perfecta para el aceite? Al meter la croqueta en la freidora tienes que fijarte que del aceite salgan burbujas pero que al mismo no esté humeando. En ese momento el aceite estará a la temperatura adecuada. Es importante no meter muchas croquetas a la vez, porque esto también provoca que el aceite se enfríe poco a poco y terminen abriéndose.

El último truco para evitar que las croquetas queden congeladas por dentro es darles la vuelta antes de que estén doradas de un lado, para sellar la fritura. En ese momento las croquetas estarán en el punto perfecto y sabrán de maravilla, sean caseras o congeladas.

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