PEPINO, CARNE DE CERDO O CAFÉ PARA PERDER PESO
¿Sabes que algunosalimentos, saludables y nutritivos, pueden ayudarte a despedirte de ese par de kilos de más? El concepto de ‘calorías negativas’ hace referencia a aquellosproductosque queman más calorías de las que aportan en el proceso de digestión. Para asimilar y extraer los nutrientes que se encuentran en ellos, nuestro organismo gasta más energía que la que estamos ingiriendo. Incluir estosalimentosen una dieta equilibrada ayuda a adelgazar y aporta nutrientes como vitaminas y minerales. ¡Prueba a introducirlos en tu dieta!
Las 12 de la mañana. Después de tres horas sin llevarte nada a la boca, tu estómago ruge pidiendo un tentempié. ¿Chocolatinas, galletas, patatas fritas? ¡Olvídalas! A partir de ahora tus mejores amigos son las manzanas, la papaya o el pepino.
Seguro que ya has escuchado el concepto de calorías negativas. Este término hace referencia a aquellos alimentos que queman más calorías de las que aportan en el proceso de digestión. Es decir, para digerirlos y extraer todos los nutrientes que se encuentran en estos productos, nuestro organismo gasta más energía que la que estamos ingiriendo con ellos.
A pesar de que parece la solución perfecta para todos los problemas de sobrepeso, muchos expertos no están muy de acuerdo con esta idea. Defienden que una dieta no se puede basar simplemente en la ingesta de estos productos porque podemos mostrar carencias de grasas saludables y proteínas. Además algunos de ellos, como el café, se deben consumir de forma moderada. Pero sí que afirman que incluirlos en una alimentación equilibrada supone una gran ayuda para perder peso y sumar nutrientes como vitaminas y minerales.
Verduras ‘quemagrasas’
A partir de ahora formarán parte de tus ensaladas o tus guarniciones. El pepino es perfecto para un picoteo a media mañana, aportando una gran cantidad de vitamina C a nuestro organismo y ayudando a prevenir la retención de líquidos. Los espárragos también eliminan toxinas, son ricos en folatos y activan tu metabolismo. Inclúyelos como la guarnición perfecta para tus segundos platos. ¿Y de primero? La coliflor te sumará vitamina K y fibra.
Apúntate a las carnes magras
Sí, tienen más calorías que las verduras, pero la carne también te puede ayudar a quemar calorías. ¿Por qué? Por su alto contenido en proteínas. A nuestro organismo le cuesta más trabajo digerir este nutriente que los hidratos de carbono. Escogiendo carnes como el pollo, el cerdo o el pavo estarás tomando un producto con bajo contenido en grasa que, además, te aportará gran cantidad de energía para enfrentarte a una tarde de trabajo o a esa sesión en el gimnasio.
¡Al rico tomate!
Asado, triturado o simplemente con un chorrito de aceite de oliva. Además de activar tu metabolismo los tomates te ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares disminuyendo los niveles en sangre de colesterol ‘malo’ y beneficiando a aquellos que tienen una tensión alta. Toma este delicioso producto por las mañanas acompañando a tus tostadas, échalo en la ensalada o úsalo como guarnición para tus pescados.
¿Y la fruta?
Llega la hora de la merienda y te apetece algo fresquito y refrescante. ¡Es la hora de la fruta! Las manzanas más verdes te aportarán una gran cantidad de fibra y te proporcionarán esa sensación de saciedad hasta la próxima comida. Y si quieres algo más tropical, la papaya suma antioxidantes y vitaminas A, C y E, aparte de aumentar tu metabolismo.
Con moderación
Sí, una taza de café solo no te aporta calorías, estimula la quema de grasas para la obtención de energía y activa el metabolismo. Pero, cuidado, siempre debes consumirlo con control porque un exceso de cafeína puede provocar aumento del ritmo cardiaco y de la tensión arterial, arritmias, irritabilidad, insomnio… Limita su consumo a las mañanas y no añadas leche ni azúcar para no sumar calorías.