SI TE ENCANTA EL FOIE, TE ENCANTARÁN ESTOS PLATOS
La secuencia es esta: te ingresan la nómina, te vienes arriba, te vas al mercado, te compras un bloc de foie que tiembla el misterio y a final de mes, triste y cabizbajo, te encuentras en la nevera las sobras y lo sabes qué hacer con ellas. Pero nosotros sí. Estos cinco platos, por ejemplo.
A todos nos ha pasado. Es principio de mes, acaban de ingresarnos la nómina y nos hemos ido al mercado con una sonrisa de oreja a oreja flotando en una ilusoria nube por encima de la crisis. Entonces vemos ese maravilloso bloc de foie y, sin pensarlo demasiado, nos lo agenciamos y lo colocamos con ilusión y delicadeza en la nevera.
Tres semanas más tarde, allá hacia fin de mes, lo miramos con incomprensión y con la angustia de pensar que nos hemos dejado un pastizal en algo con lo que no sabemos qué demonios hacer. Pues no sufráis, que aquí está la tita Virgi para convertir vuestros arranques de estupendismo en deleites para vuestro paladar.
Nota: cuanto más puro sea el bloc de foie (lo ideal es 98-100%), mejor (pero también más caro). El porcentaje indica la proporción de hígado respecto a otros productos (Armagnac...).
1. Tallarines negros con foie y manzana al Grand Marnier
La base de esta receta es una salsa de foie que se lleva bien tanto con la pasta como con carnes de cualquier tipo. Y es tan sencilla que ofende: nata líquida al fuego e ir echando el bloc de foie para que se deshaga. Si con ella acompañas a unos tallarines negros y unos dados de manzana flambeados al Grand Marnier, me querrás para siempre.
2. Hamburguesa con foie
Si eres de los que compran las hamburguesas ya hechas, esto te va a dar un perezón increíble. Pero si no, añade a la carne picada unos trocitos muy pequeños de foie. El que quede en contacto con la sartén se caramelizará y el de dentro se fundirá, dando como resultado una hamburguesa dulce y jugosa. Puedes añadirle también algún otro ingrediente, como tomate seco.
3. Bombones de foie con polvo de quicos
Esta es apta para todos, menos para los que son muy divinos y se niegan la comida con las manos. La ideas es coger una bolsa de quicos y majarlos (de poco en poco) en el mortero junto con unos granitos de sal gorda: obtendrás un polvo de quicos. Si quieres una textura más fina, tendrás que ir tamizando el resultado para descartar los granos más gordos. Ahora coge trocitos del bloc de foie y con las manos haz pequeñas bolitas, que luego rebozarás en el polvo de quicos.
4. Macedonia con foie
Suena muy loco, lo sé, y obviamente no funciona como postre, pero esta "macedonia" triunfará como entrante o como tapita. El foie combina maravillosamente bien con la fruta, especialmente con las más invernales. Dispón como base unas láminas de higos y unos gajos de naranja y reparte por encima unos trocitos pequeños de bloc y unos cuantos granos de granada. Chorrito de aceite de oliva, y listo.
5. Sopa de foie y ceps
Tritura el foie con unos cuantos ceps pochados (o setas de cualquier tipo), añade caldo o nata al gusto. Decora con unas láminas finas de ceps y cebollino, o con alga wakame y bonito seco para darle un toque más oriental.