Una tendencia al alza

Botellas con nombre propio

Una cerveza dedicada a Gerard Piqué, un tequila con el rostro del músico Nacho Vegas o un vino diseñado por el diseñador Juan Duyos. Bebidas de autor.

La cerveza de Piqué, fresquita como ella sola.Cocinatis

Ya sea por un vínculo afectivo, por afinidad, por afición o por gusto, la creatividad a la hora de beber está cada vez más inspirada. Sin obviar el lógico interés comercial de todo nuevo producto, las últimas botellas en salir al mercado se apoyan en grandes nombres (y rostros) populares para conquistar a primera vista al consumidor. Da igual el tipo de bebida. La cuestión es dar otro sentido al brindis.

Sólo hay que fijarse en la nueva Piquenbauer, una cerveza cuyo lanzamiento hubiera sido distinto de no caer España tan pronto en la última Eurocopa. La birra de la cervecera artesanal Barcelona Beer Company es un homenaje al central del Barça y la Roja, Gerard Piqué, al que equiparan al mítico defensa alemán Franz Beckenbauer en un sencillo juego de palabras.

Sus ideológos son fans declarados del jugador culé, así que poco más que añadir sobre sus motivos… La Piquenbauer es una ginger wheat beer elaborada con las mejores maltas y trigo de Alemania, junto con la mejor agua catalana. Singular, sabrosa y refrescante por el toque de jengibre.

El mundo de la música tampoco es ajeno a la bebida, pues anda que no hay canciones compuestas (y disfrutadas) entre trago y trago... Tantos como discurren en un concierto, ya sea encima o debajo del escenario. La afición de los artistas por beber, ya sea para cuidar la voz o como mero placer es un secreto a voces. Algunos tienen hasta su propia Selección, como el cantante Nacho Vegas, gran fan del tequila. Su Leyendas de Mi Pueblo es un reposado 100% de agave de edición numerada y limitada a 120 unidades, cuyas ventas se destinan a un fin solidario.

Más ambiciosos han sido en Estrella Galicia, ya que con motivo del 110 aniversario de la cerveza han convocado a 53 artistas para que ilustraran su etiqueta en una colección especial de 22 millones de botellas. Mariscal es uno de los elegidos, habituado como está el diseñador catalán a deslizar su trazo sobre botellas varias. Con anterioridad ya lo hizo también para Coca-Cola, el vino Viña Vitarán 1999, los cavas Feliz Milenio y Mediterrània, y el ron Papá Andrés.

En el terreno de la moda, con el que la gastronomía suele generar sinergias de lo más variopintas, el diseñador Juan Duyos acaba de recibir el encargo de diseñar la edición limitada de Mar de Frades, el albariño de la botella azul cobalto que ha marcado tendencia. El modisto desvelará el nuevo "objeto-fetiche" con el que espera atraer a los consumidores durante su próximo desfile en la semana de la moda de Madrid. En la botella firmada por Duyos quedará reflejada la influencia "del colosal Atlántico", así como los tejidos de su última colección.

Luego está también la colaboración más usual entre bodega y chef, por la que Ángel León, de Aponiente, sirve ahora Yodo en su restaurante de El Puerto de Santa María para armonizar su cocina profundamente marina. Se trata de un Jerez nacido de la fusión del conocimiento, la experiencia y la pasión por los vinos de calidad compartidas por Juan Ruiz, sumiller del restaurante gaditano y Manuel Lozano, enólogo de Lustau. Yodo es un fino en rama limpio y brillante, de intenso color amarillo con reflejos dorados, punzante en nariz y con aromas a sal y bajamar. En boca es suave, delicado y extremadamente seco. Un vino del que sólo hay 1.000 botellasy todas están en Aponiente porque no se puede catar en otro lado.

En estos casos, el mensaje no sólo está en la botella sino que es la botella.