AMANTES DEL QUESO
Te proponemos una manera alternativa de preparar la mozzarella para presentarla como aperitivo o incorporarla en la ensalada: ¡rebozada!.
Para todas aquellas personas que nos consideramos amantes del queso, resulta que es un ingrediente apto para cualquier tentempié. Disfrutamos de una buena tabla de quesos, de la pizza de cuatro -o más- quesos y encontramos cualquier excusa para incorporarlo en nuestras recetas habituales.
Normalmente el queso no necesita mucha preparación, pero resulta que en NovaMás te traemos una receta deliciosa y muy sencilla para hacer que las bolitas de queso mozzarella queden superresultonas. La hemos sacado del perfil de Instagram @cuinagold, una mamá italiana que hace recetas muy sencillas y comparte los secretos de la gastronomía de su país a través de las redes.
Bolitas de mozzarella rebozadas
Ingredientes:
Modo de elaboración:
1. Colocamos las bolitas de mozzarella sobre un paño fino para que pierdan el suero del envase en el que suele venir.
2. Rompemos un huevo y lo colocamos en un bol para batirlo bien con la ayuda de unas varillas o un tenedor. Reservamos.
3. Esparcimos la harina de trigo en una bandeja.
4. Hacemos lo mismo con el pan rallado.
5. Vertemos en un cazo el aceite de oliva y lo ponemos a calentar a fuego medio.
6. Preparamos una fuente con un papel de cocina.
7. Pinchamos con un palillo una bolita de mozzarella, la pasamos por la harina y la rebozamos bien.
8. A continuación, la pasamos por el huevo y nos aseguramos que quede bien impregnada.
9. Seguidamente, la pasamos por el pan rallado para que toda la superficie quede rebozada.
10. Introducimos la bolita en el aceite caliente y estamos pendiente de que coja un color dorado sin que llegue a quemarse.
11. Una vez que ha llegado al punto, la colocamos en la fuente con el papel para que absorba el excedente de aceite.
12. Repetimos la operación con todas las bolitas de mozzarella que queramos preparar.
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El resultado es extraordinario: bolitas de mozzarella crujientes por fuera y deshechas por dentro. Esta preparación se puede convertir en un aperitivo perfecto -y darle una vuelta de tuerca al clásico brie rebozado- al acompañarlas de mermeladas de frutos rojos o de tomate. También puede ser la proteína adecuada para darle un toque distintivo a una ensalada mediterránea.
La mozzarella con denominación de origen
Aunque solo sea por verlas en los envases de plástico que podemos encontrar en cualquier superficie con el queso rallado ‘especial para pizzas’, a todos nos resulta familiar el queso mozzarella. ¿Pero cuál es el original? ¿El fresco o el seco? ¿De dónde proviene?
Resulta que la variedad más auténtica es la Mozzarella de búfala campana, un queso mozzarella, elaborado a base de leche de la hembra del búfalo de agua (Bubalus bubalis), con Denominación de Origen Protegida de la región italiana de Campania. En 2008 la Unión Europea le concedió el indicador de Denominación de Origen Protegida, dado que su principal características es que se produce íntegramente con leche de búfala de la Campania.
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