UN PLATO ‘SOS’TENIBLE
Si hay un plato legendario de la costa levantina ese es el arroz a banda. Similar al del senoryet porque ambos están hechos con el caldo del pescado y se sirven limpios de tropezones, con las gambas peladas y el mero o calamar troceado para comer el arroz directamente sin mancharse las manos con los ‘bichos’, no hay que confundirlos.
Se trata pues de un plato mediterráneo, muy propio de los pescadores, cuya particularidad es que de un plato se sacan dos. Y es que eran los trabajadores del mar quienes se las ingeniaban para preparar dos recetas a partir de una.
Primero se hace un caldo de morralla, ñora y alioli, en el que se cocinan por separado arroz y pescado, y posteriormente (a veces incluso pasan días para que el caldo coja todo su jugo) se hace un guiso con ese mismo caldo en el que flota alioli, patata y pescado desmenuzado. De esta manera, con el fondo de pescado al que se le añade el sofrito se puede cocinar, además, un arroz en paella sin otro aditivo. La costumbre es servir el caldero. El alioli o ajo-aceite es también un acompañamiento fundamental, pues tradicionalmente proporcionaba a los pescadores las calorías que necesitaban y que no podían conseguir de otra manera.Su origen humilde que surge, como tantos otros, de la necesidad y el hambre de una época muy concreta de la historia de España, demuestra que la receta original partía de un caldo de pescado barato y con muchas espinas, un producto de muy poco valor que sin embargo servía de sustento a las gentes del mar que vendían en el mercado sus mejores piezas. En ese caldo, se cocía un arroz que se comía aparte del pescado. De ahí el nombre de arroz a banda, (aparte). Hoy las cosas han cambiado y el arroz a banda es uno de los platos más exquisitos y mejor tratados de nuestra gastronomía. Son muchos los restaurantes que se afanan por devolver a esta receta el valor que merece en la mesa elaborando sus caldos con el pescado y el marisco más selecto del día. Los chefs saben mejor que nadie que un buen fumet es fundamental para conseguir un buen arroz a banda.
La elección del arroz también importa. Para este plato hemos confiado en el arroz clásico de SOS, que tan buen resultado nos da. El arroz de siempre. Ideal para platos tradicionales.
LA RECETA
TIEMPO DE ELABORACIÓN: 40 min
DIFICULTAD: Media
RACIONES: 4
INGREDIENTES:
240 g de arroz SOS Redondo
720 ml de caldo de pescado (pescado de roca, patata, cebolla, tomate, laurel)
12 gambas
300 g de sepia limpia
1 tomate maduro grande
1 diente de ajo
Unas briznas de azafrán
½ cucharadita de pimentón
Aceite de oliva
Sal
Alioli (opcional)
PREPARACIÓN:
1. En una paella, dora a fuego medio el diente de ajo picado. A continuación, añadir la sepia picada en cubos menudos. Sube el fuego y remueve constantemente evitando que se queme el ajo.
2. Cuando se evaporen los líquidos, añade el tomate rallado y deja evaporar nuevamente, esta vez a fuego medio. Añade el pimentón y el azafrán. Remueve.
3. Añade el arroz, rehoga con el sofrito. Agrega el caldo y sube el fuego para que cueza a fuego vivo. Pon a punto de sal.
4. Cuece y, pasados 5 minutos, añade las gambas peladas. Baja el fuego a medio-bajo y cocina otros 10-12 minutos más hasta evaporar el caldo. Deja reposar tapado con un trapo un par de minutos.
5. Si lo deseas, puedes servirlo con alioli.
UN PLATO ‘SOS’TENIBLE
A pesar de que el arroz a banda es en sí mismo un plato de supervivencia y de aprovechamiento, aún podemos colaborar más con el medio ambiente elaborando una receta 100% sostenible. La revolucionaria marca SOS nos anima a aplicar estas iniciativas en nuestra cocina, de manera que reduzcamos la huella medioambiental. Toda pequeña acción puede suponer un cambio sustancial.
- Recicla: una vez consumido el arroz, recicla el envase, se trata del único envase de arroz del mercado 100% papel, totalmente reciclable y biodegradable. Tan solo tienes que acercarte al contenedor azul.
- Ahorra agua: tres de cada 10 personas no tienen acceso a agua potable. Más de 2.280 millones de personas en el mundo aún no pueden disponer de agua en sus hogares. SOS nos insta a ser responsables y conscientes de un uso correcto de este bien básico. Utiliza la cantidad justa para elaborar tus recetas y ahorra.
- No desperdicies energía: sigue los mismos pasos que con el agua. Ahorra energía siguiendo los pasos indicados en el envase. Obtendrás un arroz al punto sin necesidad de tener encendido tu fuego o vitrocerámica. Procura que el diámetro no sobrepase del recipiente y apaga la vitro unos minutos antes para aprovechar el calor residual.
- No desperdicies comida: eres un afortunado que tiene la oportunidad de disfrutar de una comida variada diariamente. No despilfarres y aprovecha lo que te sobre para hacer otras recetas.