ACABA DE NACER EN LONDRES
Si hace unos años te hubiesen dicho que en algún momento de tu vida ibas a tener acceso a un fish & chips vegano (sí, sí, ve-ga-no) no te lo habrías creído. Pues la realidad ha ganado la partida: acaba de abrir en Londres el primer establecimiento especializado en esta receta.
Londres es ese lugar donde se cuecen, con permiso de Nueva York, todas las tendencias gastronómicas, desde las más insustanciales a aquellas que acaban triunfando en todo el planeta. Es por ello que conviene prestar atención a la última sensación en la capital británica: una tienda de fish & chips vegano que ha abierto recientemente sus puertas con gran éxito entre el personal. Ahora viene la pregunta: ¿qué entendemos por fish & chips vegano? La respuesta es tan sencilla como también puede ser decepcionante: "en nuestro pescado no hay pescado", explica el padre de la criatura, Daniel Button.
Esto significa que en este establecimiento sirven, en realidad, una serie de propuestas veganas que, bajo el paraguas de fish & chips, resultan más atractivas para el consumidor omnívoro. De hecho, el aspecto del fish & chips es exactamente el de un fish & chips y la versatilidad de la propuesta es perfecta para la zona en que se encuentra, el este de Londres, epicentro 'healthy' de la ciudad donde los haya. ¿Cómo se elabora este pescado que no es un pescado? Es, en realidad, una flor de banana marinada con algas e hinojo marino, que aportan al "fish" que en realidad no lo es un potente sabor marino. Por su parte, las gambas veganas se elaboran con patata japonesa y se sirven rebozadas.
Cuentan también con salchichas y hamburguesas veganas, aunque el rey del mambo es el fish & chips. La gracia de esta propuesta que combina el plato grasiento e hipercalórico por excelencia con las nuevas tendencias de comida saludable es que es potente, contundente y absolutamente anti-resaca (de hecho, se sirve frito), pero a su vez libre de aditivos y procesados. Todo lo que venden en este establecimiento es 100% vegano y, como era de esperar, no ha acabado de poner de acuerdo a los primeros consumidores en probarlo. Hay quien opina que no sabe a pescado, de manera que por qué el nombre, los que piensan que es una más de las numerosas propuestas veganas que no acaban de ser saludables (hay muchos fritos) y quienes creen que es una gran idea para introducir a los omnívoros en la cultura vegana de una forma sencilla y práctica, mediante propuestas reconocibles con las que ya están familiarizados.