A través de una aplicación de móvil
¿A qué nunca pensaste que el móvil, que también te sirve para pedir comida, iba a ser tu herramienta para dejar de pensar en 'fast food'? Escucha lo que han inventado en l Universidad de Exeter.
¿Te imaginas que, cada vez que tienes un antojo de comida basura, una aplicación reprogramara tu cerebro para no ceder a la tentación? Eso es lo que quieren hacer en la Universidad de Exeter (Reino Unido) con una aplicación que han lanzado, FoodT, que hace que dejemos de desear comida insana en beneficio de alimentos más saludables para nuestro cuerpo.
La 'app', diseñada por la profesora Natalia Lawrence y que puede descargarse en dispositivos Android, permite programar cuáles son esas tres comidas que más nos tientan y de las que queremos alejarnos. A partir de ahí, lo que hace la aplicación es mostrarnos imágenes entre las que incluye las de aquellas comidas ricas en grasas y en azúcar consideradas deseables. El funcionamiento es muy similar al de un juego en el que rodeamos con un círculo verde las opciones saludables y con uno rojo las que no lo son. El funcionamiento se basa en el concepto de "entrenamiento de inhibición de la respuesta", que permite reducir la ingesta excesiva de comida y llevar a las personas a hacer una pausa antes de comer o beber impulsivamente.
"Es una herramienta para ayudar a la gente a tomar decisiones más saludables. En un momento en el que tenemos tanta comida que no es sana a nuestro alrededor y la obesidad es una crisis sanitaria cada vez mayor, necesitamos diseñar formas innovadoras de ayudar a la gente a vivir de una manera más saludable. Somos optimistas sobre el hecho de que esta 'app' pueda ayudar a las personas a elegir frutas y vegetales en detrimento de comida basura", asegura Lawrence.
Las primeras pruebas han demostrado la efectividad de la aplicación. El primer estudio desarrollado con 83 adultos demostró que si los participantes jugaban cuatro veces a la semana en su casa con la aplicación su ingesta de calorías se reducía en 220 al día. Además, los responsables de desarrollo de la 'app' afirman que el juego puede tener un mayor efecto si se lleva a cabo en el lugar donde habitualmente se consuma la comida basura, ya sea en el sofá o en un restaurante de 'fast food'.