RETOQUES ESTÉTICOS

Los tratamientos con bótox más populares entre los jóvenes

Cada vez son más las personas que deciden someterse a tratamientos estéticos a edades tempranas. La toxina botulínica o bótox es la sustancia que más se suele usar en las consultas y es la protagonista de las tres técnicas más demandadas por este colectivo.

Con la llegada del buen tiempo, es imprescindible preparar nuestra piel para que no sufra con el exceso de exposición solar al que la vamos a someter, sobre todo teniendo en cuenta que lleva meses sin entrar en un contacto directo con los intensos rayos de sol del verano. Una mala protección puede desencadenar la aparición de manchas e incluso de arrugas, además de otros problemas dermatológicos más graves.

Por ello, cada vez son más las personas que deciden someterse a determinados tratamientos estéticos para reducir los signos de la expresión causados por el sol. Según Bloome -una marca de medicina estética para jóvenes- es un comportamiento con una incidencia superior entre los más jóvenes y la llevan a cabo especialmente en primavera, "la mejor época para empezar a tratar y corregir los signos que pueden acentuarse con la llegada del verano".

En la actualidad, este grupo suele elegir entre tres tipos de tratamientos con el bótox como protagonista.

Bótox, la sustancia favorita de los jóvenes en los centros estéticos

Sin duda, el bótox es un nombre que siempre va de la mano de la medicina estética. Según apunta Pilar Souto, doctora de Bloome, "es uno de los tratamientos que ofrece mayor versatilidad, ya que se puede utilizar en diversas áreas del rostro, como la frente, el entrecejo, las patas de gallo, el cuello y la zona peribucal".

Uno de los puntos positivos de esta técnica es su aplicación, puesto que además de ser mínimamente invasiva, los resultados se pueden ver rápidamente y no se necesita un largo tiempo de recuperación. Así pues, no es de extrañar que sea una de las sustancias más populares entre los más jóvenes, un colectivo que se acerca a los centros estéticos para lograr mantener su apariencia joven, pero de una forma natural y relajada.

¿Qué tratamientos estéticos suelen elegir los jóvenes?

En los últimos años, los centros estéticos han notado un incremento de peticiones por parte de jóvenes, especialmente movidos por la intención de querer prevenir y prolongar la aparición de los signos de la edad. Entre los tratamientos existentes, Bloome destaca que son tres los más demandados, todos ellos basados en la inyección de bótox.

La técnica del Baby Bótox

Según apunta la marca, el Baby Bótox encabeza el ranking de los tratamientos estéticos por los que jóvenes más suelen pagar. Con esta técnica, los pacientes consiguen prevenir la aparición de arrugas y otras marcas y, comparado con el tratamiento tradicional, no contiene una dosis tan elevada de bótox.

Souto indica que es una opción óptima para reducir pequeñas líneas de expresión, unas que en verano pueden intensificarse más, "puesto que es habitual fruncir más el ceño y la frente y entrecerrar más los ojos para protegerlos de la radiación solar".

Aun así, también es un tratamiento que se suele pedir durante todo el año, especialmente para corregir las patas de gallo. "La toxina botulínica puede ayudar a reducir su apariencia y suavizar la piel alrededor de los ojos, además de conseguir la apertura de la mirada", afirman desde el centro.

La corrección de Bunny Lines

Otro de los tratamientos que se ha popularizado más desde el pasado año es la disminución de las Bunny Lines o arrugas de conejo, las líneas horizontales que aparecen al lado de la nariz cuando sonreímos o fruncimos el ceño, por ejemplo. Lo que se busca con este tratamiento es reducir su apariencia, para "conseguir un aspecto más relajado de la zona".

Como tratamiento contra el bruxismo

Sin duda, el bruxismo es una afección que cada vez sufren más personas, pues una gran multitud aprieta y rechina los dientes mientras duerme o incluso durante el día, especialmente provocado por la ansiedad y el estrés.

Más allá del uso de férulas dentales, se ha popularizado la inyección de bótox para relajar la musculatura de la zona. Desde el centro, afirman que "evita que el paciente siga teniendo los efectos negativos que puede provocar este hábito, como dolor y tensión en la mandíbula, incluso fracturas dentales".