Tips y consejos

¿Sientes que has envejecido durante el confinamiento? Tranqui, no estás sola

Habrá empezado la desescalada y unas saldrán mucho y otras poco y con respeto. Sea cual sea tu opción, lo que sí te has percatado es que después de tres meses de encierro te notas más mayor de golpe.

Ojeras y mala caraiStock

¿Qué hacer? No te preocupes, estamos aquí para ayudarte. Hemos hablado con varias firmas de cosmética a este respecto y esto es lo que nos han contado. ¿Pensabas que lo de haber envejecido era un pensamiento tuyo? Pues ya ves que no, que es cosa generalizada, así que no panic.

Estado de la piel en general

“El confinamiento ha cambiado el tipo de estrés al que estamos sometidos. En este sentido, el ritmo frenético ha dado paso a un estrés más focalizado en el miedo y la incertidumbre. Este estrés se puede traducir en una falta de oxigenación de la piel y en brotes de acné por una sobreproducción de sebo que responde a una somatización de dicha tensión. Esto puede hacer que las pieles se queden apagadas y pierdan vitalidad. En este sentido, pueden venir muy bien las curas con ampollas que ofrezcan fases de revitalización de la piel, o productos con cargas de oxígeno para que la piel trabaje y reciba mejor otros principios activos al ofrecer una mejor transpiración y perceptibilidad de los principios activos”, dice Estefanía Nieto, directora técnica de Omorovicza.

“El confinamiento ha producido que las pieles se desprotejan bastante y tengan incluso un déficit de vitamina D y antioxidantes. En este sentido, la piel se ha encontrado de golpe con el verano, el calor y un mayor índice de radiación solar. La piel está hipersensibilizada y hay que llenarla de energía y resistencia con antioxidantes tanto por uso tópico, como por vía nutricional, añadiendo a la dieta alimentos ricos en vitaminas C y E, por ejemplo, o con productos de belleza ricos en las mismas vitaminas o en astaxantina o cobre, de alto poder protector de la piel. De esta manera, estará más luminosa y resistente, evitando así quemarnos con tanta facilidad por el sol, por ejemplo”, explica Raquel González, directora de educación de Perricone MD.

Acné a cascoporro

“Tanto en el confinamiento como en las fases de desescalada estamos atendiendo muchos casos de brotes de acné adulto, que responden a un aumento del estrés o la tensión, y al abuso de determinados tratamientos que, precisamente, buscan prevenir los brotes, como son los exfoliantes físicos o químicos. Es cierto que una manera de tratar estas imperfecciones es con productos desintoxicantes o con ácidos como el salicílico, el mandélico o el glicólico pero, usados en demasía, producen el efecto contrario. ¿Por qué? Porque podemos acabar con la barrera de lípidos que protege la piel. De este modo, la piel producirá más sebo para equilibrar esa falta y dando lugar a los mencionados granitos. Para ello, es importante equilibrar el sebo sin pasarse y usar productos astringentes que no solo se limiten a exfoliar, para no aplicar exceso de ningún principio activo sobre la piel”, añade Elisabeth San Gregorio, directora técnica de Medik8.

Envejecimiento

“Cuando hemos llegado a la fase de desescalada, muchos han apreciado una cascada de envejecimiento en su piel. Esto ocurre por los picos de estrés asociados al miedo y la incertidumbre de la situación que hemos vivido. También muchos han cambiado su rutina alimenticia hacia propuestas, a veces, menos saludables. Esto puede hacer que la piel pierda sustancias esenciales para que esté firme, como el glutatión, por ejemplo. Se debe equilibrar todo con ricos principios antiedad como el ácido hialurónico, la acyl glutationa, los retinoides, etc. Recomendamos siempre acudir a un centro para que alguien especializado pueda ver esa piel de cerca y prescribir no solo para resolver la preocupación, sino para hacerlo de acuerdo a las condiciones de cada piel, con los principios que mejor le puedan venir”, comenta Valeria Navarro, directora técnica de Boutijour.

Mujer cansada | iStock

Ojos, el espejo del alma

“El contorno de ojos es uno de los grandes perjudicados ante la situación que nos acontece. ¿Por qué? Por la somatización del estado de ánimo y por una alteración en los ritmos, fruto del cambio de rutinas de sueño, por ejemplo. De hecho, no se aprecia solo un peor contorno -mayores ojeras e inflamación, por ejemplo-, sino también una caída de las pestañas superior a la habitual. Por eso, deberemos tratar esta área tan específica y sensible con principios que traten la mirada en conjunto, acudiendo a sueros que acondicionen cejas y pestañas y a contornos que traten la piel de la cuenta del ojo trabajando pigmentación e hinchazón, con activos como la hesperidina o la cafeína, por ejemplo”, dice Diana Suárez, directora técnica de RevitaLash Cosmetics.

Un último consejo

“Una clave para mejorar la piel, aunque parezca menos imprescindible, es mejorar el estado de ánimo. Nuestra piel es un fiel chivato de nuestras emociones y por ello suele somatizar todo, dando como resultado brotes, envejecimiento repentino, etc. La aromaterapia ayuda a equilibrar las emociones tanto por vía tópica como por el olfato, activando el sistema límbico y conectando con las emociones. Aceites ricos en lavanda o vetiver pueden aportar gran relación y otros, como el geranio, pueden cargar de energía. Una mente sana promoverá un cutis que sea un fiel reflejo de cómo se encuentra”, finaliza Bella Hurtado, directora de educación de Aromatherapy Associates.