RUTINA DIARIA
Si no conoces los beneficios del aceite de rosa mosqueta para la piel, aquí tienes un buen puñado de razones que te convencerán para incluirlo en tu rutina de belleza.
La rosa mosqueta es mucho más que un aliado para curar las quemaduras y las heridas. Se trata de uno de los imprescindibles que nunca debe faltar en nuestro tocador. Mundialmente conocido por sus propiedades cicatrizantes, el aceite de rosa mosqueta es un auténtico regalo de la naturaleza y un básico de la cosmética natural gracias a todas las propiedades que aporta únicamente aplicándolo sobre nuestra piel.
El mejor aceite de rosa mosqueta es el que proviene de la agricultura biológica, cultivado sin plaguicidas. Aquel que se elabora a partir de ingredientes de origen natural, de forma sostenible y con el mínimo impacto en el medio ambiente. Estos son algunos de sus múltiples beneficios cosméticos.
1. “Este aceite natural procede de las semillas del arbusto llamado rosa rubiginosa y se ha utilizado desde tiempos inmemoriales gracias a su composición rica en vitaminas, ácidos grasos esenciales y antioxidantes”, explica Natalia Olmo, experta en dermocosmética.
2. El aceite de rosa mosqueta puede funcionar como una excelente alternativa natural para la hidratación. Tiene ácidos grasos nutritivos, que junto con el agua, es el ingrediente principal en la mayoría de los humectantes. Y aquí aparece de manera orgánica.
3. Entre sus ‘poderes’ más valorados, está el de reducir las estrías y las manchas de la piel. “Su alto contenido en ácidos grasos esenciales hace que mejore visiblemente la pigmentación de la piel, su textura y su tono. Gracias a que también incorpora antioxidantes y vitaminas, sobre todo C y A, ayuda a la producción de colágeno y a la protección de los daños del sol”.
4. El aceite de rosa mosqueta funciona también como un potente producto antiedad. “Su uso continuado retrasa los signos de envejecimiento y reduce las arrugas”, añade la fundadora de Maminat, una firma eco-friendly que apuesta por productos elaborados con ingredientes 100% naturales, entre los que se encuentra el aceite de rosa mosqueta. “Está presente en muchos de nuestros productos. A pesar de que trabajamos con diversos aceites, lo cierto es que este es uno de nuestros favoritos”.
5. Ya lo sabíamos, pero lo cierto es que se ha demostrado recientemente que el aceite de rosa mosqueta atenúa y trata eficazmente las cicatrices, estrías y quemaduras. “Esto es gracias a la vitamina A. No solo ayuda a una correcta cicatrización, además regula la producción de melanina”, concluye Olmo.
6. La rosa mosqueta contiene ácidos grasos omega 3, 6, 7 y 9 y carotenoides, que nutren la piel, y ácido linoleico, un tipo específico de ácido graso que es capaz de reducir el acné.
7. Las propiedades astringentes del aceite de rosa mosqueta ayudan a cerrar los poros e iluminar la piel, por lo que agregar un producto como el aceite puro orgánico de semilla de rosa mosqueta o un aceite facial iluminador de rosa mosqueta a nuestra rutina de cuidado de la piel es excelente si nuestras mejillas necesitan un poco de brillo. Comienza con una pequeña cantidad diaria: aplica unas gotas sobre la piel limpia antes de acostarte y te levantarás con una piel más iluminada a la mañana siguiente.
8. Al igual que el azúcar y la sal marina, el aceite de semilla de rosa mosqueta puede funcionar como un exfoliante natural cuando se combina con bicarbonato de sodio. Eso sí, evita usarlo de esta manera si tu piel es propensa al acné, ya que este aceite puede irritar aún más las imperfecciones que están obstruyendo los poros.
9. Un truco de belleza para acabar con esas odiosas manchitas rojas e igualar de una vez por todas el tono de la piel. Este cóctel de vitaminas es mucho mejor para la piel sensible que el zumo de limón que habitualmente se usa contra las manchas, así que frota suavemente aceite de rosa mosqueta sobre la piel limpia y húmeda tanto por la mañana como por la noche, y prepárate para ver resultados en unos días.