CUIDA TU IMAGEN

Retoques en el rostro: ¿Qué es la huella estética positiva?

Si tienes pensado hacerte retoques faciales, infórmate bien sobre la huella estética, cómo influye en la apariencia y qué debes hacer para que en tu caso sea positiva y no negativa. Así lograrás un resultado natural que perdurará en el tiempo.

Retoque estéticoFreepik

Los tratamientos estéticos faciales son cada vez más comunes para combatir los signos de la edad y los rasgos que nos generan inseguridades. Aunque muchos de estos retoques buscan mejorar nuestra apariencia, lo cierto es que los resultados no siempre son los esperados. Aquí es donde entra en juego el concepto de "huella estética", un término que se refiere al impacto de los procedimientos estéticos a lo largo del tiempo.

La acumulación de volumen en ciertas zonas del rostro, como el conocido pillow face, es un ejemplo de los efectos no deseados de algunos retoques estéticos, lo que se denomina huella estética negativa. Por el contrario, cuando los resultados son satisfactorios y naturales, hablamos de una huella estética positiva. Alcanzar uno u otro resultado dependerá de la calidad de los productos utilizados, la técnica de aplicación y la profesionalidad del médico estético que elijas.

Retoque estético | Freepik

Huella estética positiva y negativa

Como hemos visto, la huella estética puede dividirse en dos: positiva o negativa, dependiendo del resultado final del tratamiento. De acuerdo con Mesoestetic, marca reconocida en el sector de la cosmética médica, la huella estética negativa es aquella que no responde a las expectativas del paciente. Generalmente, esto se debe a un mal uso de productos, falta de técnica, o un protocolo erróneo por parte del profesional que realiza el tratamiento.

En cambio, la huella estética positiva se logra cuando el resultado se adapta a los deseos del paciente y mejora la armonía del rostro, respetando su forma natural y el inevitable del paso del tiempo. La clave está en la selección del producto adecuado en cada caso y en una aplicación experta.

Retoque estético | iStock

Cómo conseguir una huella estética positiva

La principal recomendación para evitar una huella estética negativa es elegir bien a los profesionales. No basta con que el médico estético sea conocido, sino que debe estar cualificado y tener experiencia. Según Mesoestetic, es esencial que el especialista entienda la estructura facial y utilice las técnicas más adecuadas para respetar la armonía de tu rostro.

Por ello, antes de decidirte por un tratamiento, asegúrate de que el profesional esté colegiado y cuente con las credenciales necesarias para llevar a cabo el procedimiento. No dudes en solicitar referencias o ver ejemplos de trabajos previos para asegurarte de que puedes confiar en él.

Otro factor clave es la calidad del producto que se va a utilizar. Mesoestetic subraya la importancia de elegir clínicas que trabajen con productos que cuenten con el marcado CE, un certificado que garantiza la seguridad y eficacia de los tratamientos. Productos no homologados pueden tener consecuencias graves en la piel y dejar una huella negativa.

Una chica se somete a un tratamiento de bótox | iStock

Tener paciencia y cuidarse en casa

Muchas veces, en la búsqueda de resultados rápidos, los pacientes tienden a solicitar más sesiones de las recomendadas o acortar los tiempos entre ellas. Este es un error común que puede dar lugar a un resultado no natural o sobrecargar la piel. El consejo de los especialistas es claro: respetar los tiempos es fundamental para que el tratamiento estético sea eficaz y tenga un resultado positivo a largo plazo.

Por último, destacar que el cuidado en casa es un complemento esencial para que los tratamientos estéticos mantengan su efecto y la huella estética se mantenga positiva. Después de realizarte un retoque, sigue las indicaciones del especialista y utiliza productos recomendados para tu tipo de piel. Además, no olvides la importancia de una buena rutina de higiene, hidratación y protección solar. Estos son los pilares para mantener una piel saludable y evitar daños que puedan influir negativamente en los resultados de los tratamientos.