CUIDA TU PELO
Llevar a cabo una buena rutina de cuidado capilar es imprescindible para lucir una melena sana y con vida. Para ello, es importante hacer uso del pre-champú, un producto muy beneficioso que pocas personas conocen.
Más vale prevenir que curar. Seguramente, tú también hayas aplicado esta expresión a un centenar de decisiones y acciones en tu vida para evitar males mayores. En términos capilares, esto se traduce en gastarnos más dinero en un producto o en optar por un cepillo u otro para no dañar nuestro pelo, pero aunque lo intentemos evitar, siempre acabamos usando químicos o lo exponemos a las altas temperaturas de planchas y secadores.
Comúnmente, creemos que la correcta rutina de lavado empieza por el champú, sigue con el acondicionador y, en días puntuales, termina con la mascarilla. Así logramos mantenerlo limpio, pero se nos escapa un paso imprescindible que muy pocas personas llevan a cabo y que es el que puede darle el toque sano. El pre-champú ha llegado para salvar nuestras melenas.
Para qué sirve el pre-champú
Tal como su nombre indica, el pre-champú es un producto que aplicamos en el pelo antes de llevar a cabo el lavado. En concreto, protege las fibras capilares de los efectos dañinos que pueda generar el agua, los productos químicos o el uso de determinados utensilios como el rizador. Así pues, es un paso previo a la aplicación del champú y es fundamental para que el pelo no sufra más de la cuenta.
Cómo aplicar el producto
Normalmente, este tipo de productos suelen presentar una textura sólida muy ligera similar a la de una mascarilla, algo que resulta muy cómodo de aplicar. Aun así, para lograr un mayor efecto debemos seguir una rutina adecuada.
Antes de nada, debemos cepillar muy bien nuestro pelo, evitando enredos y, en seco, extendemos con las manos una pequeña cantidad de producto. Puedes hacerlo en el cuero cabelludo, ya que es la zona con tendencia más grasa, o de medios a puntas.
A continuación, masajeamos suavemente las zonas para ayudar a que el producto penetre mejor y dejamos actuar entre diez y veinte minutos. Transcurrido el tiempo, nos lavamos el pelo como de costumbre, siguiendo nuestra rutina favorita.
Pre-champú: estos son todos sus beneficios
Sin duda, su principal acción es la de limpiar profundamente el pelo, eliminando todo tipo de impurezas y, a la vez, ofreciendo mucha hidratación, algo positivo si queremos reducir la sequedad del pelo y queremos mantener bien hidratado el cuero cabelludo. Además, trabaja en la reparación de nuestro pelo y, por ende, ayuda a fortalecerlo, permitiéndonos lucir una melena más sana y cuidada.
Con su aplicación, lograremos reducir la presencia de grasa en las raíces, por lo que poco a poco conseguiremos mantener el pelo limpio por más días y no lo expondremos tanto a los químicos. Estos productos también actúan sobre la preservación del color, ya que con los lavados las tonalidades de los tintes suelen reducirse.
Cada cuánto tiempo debo aplicarlo
Aunque sus beneficios son muy golosos, no debemos aplicar este producto en cada lavado, pues puede llegar a tener un efecto contraproducente. Lo más positivo para nuestro pelo es alternar su aplicación entre lavados, dejando que pasen unos días. Por ejemplo, puedes usarlo entre cada tres y cinco lavados. De todas formas, esta tendencia puede cambiar si tenemos un pelo muy graso.
No es de uso único: todas las melenas pueden beneficiarse de su aplicación. En el mercado podemos encontrar todo tipo de pre-champús destinados a fines concretos, aunque todos contribuyen a mejorar el estado del pelo.
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