RUTINA DE BELLEZA
Existe la creencia de que el uso del retinol en verano provoca irritaciones y quemaduras solares en la piel, por lo que muchas personas dejan de usarlo de forma preventiva. ¿Lo están haciendo bien? ¿Existen un efecto rebote? Las expertas en dermocosmética nos resuelven las dudas.
El retinol es uno de los ingredientes estrella en el mundo de la cosmética debido a sus potentes propiedades antienvejecimiento y regeneradoras. Tan solo hace falta entrar en las redes sociales para comprobar lo bien que hablan de este derivado de la vitamina A quienes más saben sobre el cuidado de la piel. Sin embargo, en estas mismas plataformas también encontramos usuarios que sugieren que su uso debe evitarse en verano para prevenir irritaciones y quemaduras solares. ¿Qué tiene de cierto esta afirmación? Según los expertos en dermocosmética, nada. De hecho, aseguran que el retinol puede aportarnos aún más beneficios durante la época estival.
En mundo de la belleza, el concepto de efecto rebote se refiere a la reacción negativa que puede presentar la piel al suspender el uso de un producto cosmético que se ha estado usando de forma regular. En este sentido, se cree que la piel puede presentar una reacción negativa que la hace lucir peor que antes de empezar el tratamiento. No obstante, las expertas en dermocosmética aseguran que este no es el caso con el retinol ni con la mayoría de los activos cosméticos.
Según Mireia Fernández, directora dermocosmética de Omorovicza, "lo que sucede cuando dejamos el retinol es que le estamos privando a la piel de un activo muy potente y con resultados visibles en ella. Al retirarlo, dejaremos de ver esos efectos, igual que cuando dejas de teñirte, te sale la raíz en el pelo". Esto significa que la falta de retinol no genera un efecto rebote, sino que simplemente se interrumpe el beneficio que el producto estaba proporcionando.
Aunque no hay un efecto rebote per se, dejar de usar retinol sí puede provocar cambios visibles en la piel. Raquel González, cosmetóloga y directora técnica de Perricone MD, aclara que, "si tu piel necesita el retinol para, por ejemplo, reducir manchas y producir más colágeno y se lo quitas, dejará de producir esta proteína tan valiosa y verás en tu piel signos de la edad más marcados". Esto significa que, al cesar el uso del retinol, los efectos visibles de la piel mejorada disminuirán, y los problemas que se estaban tratando pueden volver a aparecer, como manchas o arrugas.
Estefanía Nieto, directora dermocosmética de Medik8, advierte que "si usábamos retinol para tratar acné, estaremos potenciando que los granitos vuelvan a aparecer. Si lo usábamos por sus propiedades antiedad, es probable que empecemos a notar cómo se marcan más las arrugas o que aparezcan más manchas". Además, Raquel González refuerza la idea de que "dejar el retinol o cualquier otro activo en una época concreta del año es un error, sobre todo si nos estaba funcionando bien en la piel. Pasados dos meses, habremos perdido todos sus efectos y habrá sido como tirar toda la inversión en tiempo y dinero a la basura".
"Debemos quitarnos los miedos asociados al retinol. No tiene por qué irritar y, desde luego, nunca irrita si ya llevamos más de un mes usándolo. Tampoco mancha, no debilita la piel… todo lo contrario", asegura Ana Yuste, asesora facial de Purenichelab.com, para que todos volvamos a amarlo incluso en la temporada de verano.