CAMBIO DE RUMBO CIRUGÍA ESTÉTICA
El sector de la medicina estética está en pleno crecimiento, cada vez menos estigmatizado y más presente entre los jóvenes. Nos lo han explicado desde Bloome, una clínica emergente que se denomina como "la nueva generación de la medicina estética".
El número total de intervenciones de cirugía estética ha incrementado un 215% durante los últimos años, según un informe la Sociedad de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética. Este auge viene acompañado de un cambio en su público que cada vez es más joven. Se trata de una nueva dirección que podría derivarse a la creciente conciencia de cuidado de la piel y mayor interés en la prevención, ya que cada vez más pacientes buscan tratamientos para mantener una apariencia juvenil incluso antes de que aparezcan signos evidentes de envejecimiento. Así lo explica Manu Caldas, cofundador de Bloome, una emergente clínica de medicina estética barcelonesa. A esta tendencia, dice, se le suma el perfeccionamiento tecnológico y desarrollo de nuevos tratamientos más asequibles y menos invasivos. Así como, expone que otro factor determinante podría ser la ascendiente aceptación social que lleva a la gente a estar más abierta a recibir tratamientos y a admitir que se han hecho uno.
Entender la medicina estética como algo que va más allá de un mero cambio físico: esta es la filosofía clave de Bloome donde perciben esta metodología como una manera de cuidar la salud y mejorar la relación de las personas con su aspecto, fortaleciendo su amor propio desde la naturalidad. "Alentamos a las personas a verse y sentirse bien consigo mismas en lugar de adherirse a estándares de belleza poco realistas", nos explica Caldas. Esta nueva narrativa, dice, aboga por lograr objetivos que se alineen con la identidad de la persona y mejoren ciertos rasgos sin perder la autenticidad facial, dentro de la diversidad de formas, colores y características. Además, trascienden lo físico apostando por un bienestar integral del paciente, ayudándole a incorporar hábitos de vida saludables y cuidado su piel con un enfoque más global de la medicina estética. Todos estos valores se aglutinan dentro del concepto de "la nueva generación de la medicina estética", con el que se identifican.
En tan solo un año, han tratado a más de 2.000 pacientes, de los cuales la mitad han repetido, nos explica Caldas. Y es que más allá del auge del sector, ha sido la visión transgresora que tiene Bloome de la medicina estética lo que les está haciendo crecer de forma exponencial, sobre todo entre las generaciones jóvenes. "Desde el inicio, Bloome ha sido creado con un único propósito: hacer que la gente viva más y mejor. Estamos obsesionados por hacer de Bloome un proyecto que aporte a la sociedad y haga del mundo un lugar un poco mejor", explica el cofundador.
De hecho, Caldas dice que han notado una creciente demanda por parte de pacientes en varias ciudades españolas e incluso en Europa. "Se trata de gente que quiere que llevemos Bloome a su ciudad, pero por ahora decidimos quedarnos en Barcelona para mejorar la experiencia del paciente al máximo. Ya nos plantearemos ir a por más cuando sea el momento", puntualiza.