MEDICINA ESTÉTICA
Cuando adelgazamos mucho en poco tiempo, uno de los primeros lugares donde se nota (para bien o para mal) es en el rostro. La cara tiende a parecer más envejecida, con flacidez y arrugas.
Cuando decidimos adelgazar, todos tenemos la misma idea: reducir barriga, afinar cintura, deshacernos de esos kilos rebeldes... Pero hay algo que casi nunca nos cuentan: cuando pierdes peso, no eliges de dónde y muchas veces la cara pierde las facciones que nos embellecen o identifican.
Celebridades como Meghan Trainor, Demi Moore o Selena Gomez han experimentado cambios físicos importantes en los últimos tiempos. Sus pérdidas de peso han coincidido con un cambio visible en su rostro. ¿A mejor? Desde luego, hoy todas lucen espectaculares. Pero lo cierto es que es prácticamente imposible adelgazar tan rápido y que tu cara luzca perfecta sin ayuda profesional.
Cuando adelgazamos, el cuerpo quema grasa de donde puede, sin preguntarnos qué zona nos gustaría conservar.
La grasa facial (esa que sostiene las mejillas, la mandíbula y las sienes) se pierde igual que la del resto del cuerpo. ¿El resultado?
Desde la consulta, lo vemos cada día: pacientes que celebran su nueva figura, pero que no terminan de reconocerse en el espejo. Porque el volumen facial no solo es cuestión de estética, sino también de juventud y armonía.
Y claro, a nadie le gusta ver en el espejo una versión más cansada de sí mismo, justo cuando se supone que debería verse mejor.
Además de afectar la elasticidad de la piel, adelgazar de forma acelerada debilita la estructura del rostro.
La piel pierde colágeno y elastina, y la grasa de soporte que mantiene los contornos juveniles desaparece.
La conclusión es simple: si vas demasiado rápido, tu piel no te sigue el ritmo.
Una pregunta que nos hacen mucho es: ¿debemos tratar el rostro mientras estamos adelgazando o esperar? Lo ideal es esperar a que el peso se haya estabilizado. Así, los tratamientos estéticos pueden actuar sobre una base firme y ofrecer resultados naturales.
¡Y sí, sabemos que la impaciencia puede jugar malas pasadas! Pero un poco de paciencia ahora ahorra muchos retoques después.
Cuando el espejo refleja un cambio que no termina de convencer, la medicina estética tiene soluciones tan sutiles como efectivas:
Cada tratamiento debe ser personalizado para que el rostro recupere su vitalidad sin perder su esencia.
Con todo lo que acabamos de ver, podemos concluir que adelgazar está bien, pero el espejo no siempre te aplaude. Después de sus pérdidas de peso, tenemos claro que Meghan Trainor, Demi Moore y Selena Gomez han recibido ayuda profesional. La armonía facial que muestran hoy es el resultado de alguna que otra sesión en la camilla de su médico estético o cirujano plástico.