EN ALEMANIA
El 25 de diciembre es un día de celebración y de ilusión para los más pequeños de la casa, que emocionados, madrugan para descubrir qué regalos ha dejado Papá Noel.
Sin embargo, Papá Noel, -que tiene umucha carga de trabajo en estas fechas-, no siempre acierta con sus regalos a pesar de la buena intención que le pone y no todos los niños acaban muy contentos.
Es el caso de un niño alemán de nueve años al que no le gustó nada la elección de Papá Noel. El pequeño pudo haberse conformado con un 'gracias' y una sonrisa falsa, pero en vez de eso, decidió tomar cartas en el asunto y dar un paso más: el joven llamó a la Policía para quejarse por lo sucedido.
El niño explicó a los agentes a través del teléfono que no había recibido ninguno de los regalos que él había pedido para Navidad por lo que más tarde dos agentes se presentaron en su domicilio y encontraron a un niño "muy enfadado", revela el portavoz de la Policía Local de Zetel, al noroeste de Alemania.
Como el día de Navidad no había mucha demanda, la Policía decidió seguirle el juego al niño y 'abrió una investigación del caso'.
Primero examinaron la lista inicial de Navidad que el niño había escrito y luego la compararon con cada uno de los regalos que Santa Claus había dejado en la casa.
Tras un minucioso examen de las pruebas, la Policía pudo resolver la disputa indicándole al niño que lo más probable era que Santa Claus hubiese confundido su lista de deseos con la de otro niño.