ASTILLERO BARRERAS
El crucero de The Ritz Carlton, con capacidad para más de 500 personas, se encuentra en obras desde enero de 2018 y tenía previsto acabar su contrucción en noviembre de 2019. Sin embargo, dicha fecha de entrega no se podrá cumplir pues arrastra un retraso considerable de trabajo.
Por ello, la marca de hoteles decidió encargar a su auditoría inspeccionar sobre el estado de ejecución las obras. Durante la investigación, el auditor contratado descubrió, durante el turno de noche de la empresa portuguesa subcontratada por Barreras (Irontec Industria Naval,), a 20 trabajadores durmiendo, otro grupo de empleados pescando y en otra estancia del crucero, a un equipo de obreros viendo una película en un dispositivo electrónico.
Estos alegaron estar en un momento de falta de trabajo, por lo que tomaron la decisión conjunta de realizar otras actividades durante esa franja de ausencia de labor.
El astillero Barreras, por su parte, ha decidido rescindir el contrato con la auxiliar lusa, con sede en Setúbal, y cancelar los turnos de trabajo de noche.