SE UTILIZA DESDE LOS AÑOS 60
La técnica se utiliza desde los años 60. La máquina en cuestión, denominada Pigg-O-Stat, inmoviliza y aprisiona a los más pequeños para poder realizarles pruebas con rayos X. De esta manera, se consigue limitar su exposición a más radiación de la necesaria, mientras se les realiza el análisis.
Pero, sin duda, lo que más llama la atención de esta máquina es la posición en la que quedan expuestos los pequeños. El resultado es una adorable criatura atrapada con cara de circunstancia.
La técnica, que no era muy conocida, ya se ha hecho viral debida a las fotografías que los internautas compartieron en sus redes sociales.