Fallo técnico
Los habitantes de Castelvetro, Módena, han visto cómo de sus grifos salía Lambrusco en vez de agua. Fue en la mañana del 4 de marzo, cuando algunos residentes de Settecani, una aldea en las afueras de Castelvetro, tuvieron esta inusual sorpresa cuando fueron al baño a ducharse. Se trata de Lambrusco Grasparossa, procedente de la bodega Settecani.
Todo se debió a un pequeño colapso, que ocurrió en uno de los silos de la bodega. El vino terminó en las tuberías del acueducto y, gracias a la mayor presión, en comparación con la del agua, comenzó a circular a través de las tuberías de agua potable que terminan en algunas casas, que se encuentran en las inmediaciones de la bodega.
El fallo fue notificado inmediatamente y se envió a los técnicos para resolver la situación. Mientras tanto, vídeos y fotografías de la situación comenzaron a circular en redes sociales, con comentarios de los residentes que "embotellaron" el preciado líquido, para cenas y almuerzos posteriores.