LOS ÁNGELES | E3 2013
Microsoft ha conseguido que muchos se olviden de sus errores cometidos cuando se presentó Xbox One hace unas semanas en la conferencia que ha celebrado para abrir la feria E3 de este año. Y lo ha hecho cambiando completamente su discurso base respecto al que celebraron aquel día. En el lugar en el que antes se decía entretenimiento, ahora se dice, única y exclusivamente videojuegos. Y no videojuegos del montón: los más espectaculares del momento.
De entre todos los elementos principales que han compuesto el tejido de la conferencia de la empresa norteamericana, destacan cinco momentos claves. El primero, por orden y, para los más jugones importancia, ha sido el golpe de efecto de dar el primer paso junto a Hideo Kojima y su nuevo capítulo de la saga Metal Gear Solid. El golpe de efecto ha sido doble, ya que se mostraba un título altamente notable y, como no, porque a los más entendidos les decía una cosa: se acabó el idilio entre Solid Snake y Playstation. A partir de ahora la saga es multiplataforma desde el primer día.
El siguiente gran punto ha sido, cómo no, el del apoyo a los grandes/pequeños de la industria: World of Tanks, el fenómeno de Wargaming y Minecraft vuelven: el primero para 360, gratuito y con pagos de microtransacciones, y el segundo con versión para Xbox One.
También hemos podido ver una gran cantidad de juegos exclusivos, de la mano de estudios como Crytek (Ryse: Son of Rome), Insominac (Sunset Overdrive) o Remedy (Quantum Break). Apuestas muy fuertes que dan una palmada en la espalda al catálogo de entrada de la nueva consola. Además, se ha ofrecido un vistazo pormenorizado de lo que será Titanfall, el primer juego de los estudios Respawn, creado por algunas de las mejores mentes pensantes de Infinity Ward, creadores de Call of Duty, y se ha rescatado la saga Killer Instinc de Rare, lo que ha creado una auténtica revolución entre los asistentes a la conferencia.
Dentro de la parte menos jugona, nos han mostrado la inclusión de un sistema de recompensas para los miembros de Xbox Live Gold, que dará a los jugadores dos videojuegos gratuitos al mes, como ya hace Sony con los miembros de Playstation Plus. Los primeros serán Assassin’s Creed II y Halo 3. También se ha anunciado que la nueva consola utilizará la divisa local de cada mercado en lugar de los MS Points para realizar compras y se han mostrado nuevas aplicaciones para Smartglass.
Para acabar, la última pata de la presentación: el precio y la fecha. Ambas sin dar demasiado detalle. La consola tendrá un precio de 499€ y saldrá el mes de noviembre. Respecto al primer dato, no se ha precisado en qué condiciones o con qué elementos y respecto al segundo, no se ha dado día, pero se ha confirmado que la venta se realizará en 21 países del mundo entre los que, afortunadamente, parece ser que se encuentra España.
Nuevos eventos como la Gamescom europea o la Tokyo Game Show, así como nuevas noticias vinculados con sus lanzamientos despejarán más dudas. Hasta entonces, sólo queda esperar para saber si la nueva generación sigue el camino de la presente, llevando el ocio y los mejores videojuegos a millones de hogares de todo el mundo.