EL LÍMITE LO MARCA LA IMAGINACIÓN
Las impresoras 3D están llamadas a convertirse en un invento imprescindible. Permiten construir objetos como tazas o muñecos hasta maquinaria compleja. En León se celebra la 3D Printer Party, una feria que reúne a los principales fabricantes.
Como reconocen los expertos del sector el principal freno para que esta tecnología se popularice es su precio. Una kit de montaje de tu propia impresora puede rondar los 500 euros y una ya montada los 2.000.
Pero al margen del precio, las posibilidades parecen infinitas. Ahora ya se puede imprimir en otros materiales diferentes al plástico: fibra de carbono, madera, materiales cerámicos...
Las piezas que se pueden fabricar con las impresoras 3D son muy variadas. De pequeñas piezas industriales hasta objetos decorativos, herramientas o incluso prótesis de mano que podría rondar los 50 euros.