Inteligencia artificial
La boda se celebrará el próximo verano de 2024 en el museo Depot Boijmans Van Beuningen de Rotterdam (Países Bajos). La mujer es la artista Alicia Framis.
La búsqueda de la media naranja ha sido, es y será una constante en la trayectoria de los seres humanos. Quien más, quien menos, ha soñado al menos en algún momento de su vida, en encontrar esa persona con la que compartir el resto de nuestras vidas de una forma plenamente feliz. De ahí que se haya teorizado al respecto en todas las perspectivas y con la irrupción de la inteligencia artificial se abre una nueva vía.
Mucho se ha especulado de cómo la inteligencia artificial alterará el mercado laboral tal y como lo conocemos también sobre las puertas que puede abrirnos y las ventanas que cerrará, pero hasta ahora nadie se ha planteado la inteligencia artificial como una herramienta para crear a nuestro compañero o compañera de vida.
Precisamente sobre esta idea gira el proyecto de la artista barcelonesa Alicia Framis, 'The Hybrid Couple', donde entrelaza arte, tecnología y emociones y explora la integración de la inteligencia artificial en la vida diaria y el arte.
Framis protagonizará la primera boda entre una persona y un holograma creada a través de la inteligencia artificial. Ha creado un holograma a través de perfiles de parejas y amigos con el que se va a casar el verano de 2024.
En su proyecto se muestra a ella con su prometido realizando labores del día a día. Según la artista los compañeros de inteligencia artificial pueden ser una muy buena opción para personas que necesitan compañía.
La artista ha explicado que esta "singular ceremonia" tendrá lugar en verano de 2024 en el museo Depot Boijmans Van Beuningen de Rotterdam (Países Bajos).
Framis ya tuvo una experiencia artística con un ser no humano en 1996, cuando fue la "primera artista en convivir con un maniquí", al que llamó Pierre, y la obra 'Cinema Solo' recopila 36 fotografías y un diálogo entre ella y el maniquí. Poco tiempo atrás conocimos a Aitana, una de las primeras 'influencers' creadas por inteligencia artificial. Esta mujer no existe en el mundo real, sin embargo, cobra más de 4.000 euros al mes y tiene más de 2,7 millones de seguidores en Instagram.