Videojuegos
Microsoft ha presentado recientemente en la feria E3 de Los Ángeles su nueva Xbox 360, que esta diseñada especialmente para hacer más fácil la conexión con el futuro sistema sin mandos Kinect.
El nuevo diseño, más pequeño, delgado y de color negro, viene con un disco duro interno y extraíble de 250 gigabytes y Wifi incorporado, al tiempo que mantiene el precio del modelo anterior de 249,95 euros.
Fuentes de Microsoft destacan que se trata de un aparato muy silencioso que permite ver películas sin necesidad de descargarlas o jugar en el sistema online de Xbox, así como almacenar juegos y contenidos en su disco duro.
Aunque todas las Xbox 360 son compatibles con el sistema Kinect que se lanzará en Navidades y permitirá a los usuarios jugar sin mandos mediante el movimiento del cuerpo, la nueva Xbox está especialmente preparada para que la conexión sea inmediata.
Los accesorios y juegos de la antigua Xbox 360 son compatibles con el nuevo modelo, aunque no los discos duros externos.