Sable láser
"Acabamos de fabricar el primer dispositivo sable láser del mundo". Con esta frase, los inventores de la clásica arma de 'Star Wars' anunciaban la creación de la primera espada láser, capaz de cortar cualquier tipo de metal a una temperatura de 2.200 grados Celsius. Se trata de un grupo de ingenieros que, a través de su canal de Youtube 'The Hacksmith', daban a conocer la noticia al mundo.
El invento ha sido posible tras la aplicación del principio del "flujo laminar" que, gracias a la combinación de oxígeno y propano, genera un flujo de plasma parecido al de la clásica saga de 'La Guerra de las Galaxias'. Así, el sable arde a una temperatura de 2.200 grados y, gracias a una boquilla especial, y conectándose a una fuente de energía externa, sale disparado del mango.
La espada, resultado de cuatro años de trabajo por parte de los ingenieros James Hobson, Dave Bonhoff, Ian Hillier y Darryl Sherk, funciona de una forma muy sencilla: el plasma se calienta a una alta temperatura y, tras una elevada concentración, recrea un rayo circular de plasma brillante parecido al del clásico sable láser, haciéndolo capaz de cortar el acero con gran facilidad.
Además, ésta admite una gran variedad de colores, entre los que se incluye el verde, el naranja o el rojo, gracias a la introducción de diferentes sales que permiten el abanico lumínico.
Hobson ha explicado, a través de una publicación en su cuenta de Youtube, cómo han logrado crear este sable, y advierte que "incluso con todos nuestros nuevos equipos y capacidades, todavía estamos sujetos a las leyes de la termodinámica".
"Las teorías dicen que el plasma se mantiene mejor en un rayo mediante un campo magnético, lo cual, científicamente, está probado", continúa en su vídeo.