Inteligencia Artificial
La Xunta de Galicia quiere garantizar un uso ético y seguro de esta tecnología para salvaguardar los derechos de las personas.
No es el futuro, es el presente. La inteligencia artificial ya está aquí. No dejamos de escuchar hablar de esta tecnología que se introduce en todos los sectores; desde el económico al sanitario, desde la agricultura hasta la hostelería. Todo.
La IA se define como: la disciplina científica que se ocupa de crear programas informáticos que ejecutan operaciones comparables a las que realiza la mente humana, como el aprendizaje o el razonamiento lógico. Comparables con las que realiza la mente, pero no iguales. ¿O sí? Surgen las dudas.
Por ello cada vez son más las voces apelan a la necesidad de regularla, de poner límites, de marcar unas directrices. Esto es lo que pretende hacer el gobierno gallego con la primera ley que regula la inteligencia artificial en nuestro país e incluso más allá de nuestras fronteras. Galicia es la primera región europea en legislar al respecto.
El Ejecutivo gallego ya ha aprobado el anteproyecto de ley y ahora se inicia su tramitación parlamentaria. La previsión es que para mediados del próximo año se apruebe el texto definitivo.
Con él, se pretenden establecer un “marco jurídico estable” para “dar certezas y blindar derechos”. El objetivo fundamental es garantizar así un uso “ético y seguro”, ha explicado el Presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, junto con el conselleiro de Facenda, Miguel Corgos. Éste último relata que la ley regulará el “diseño, adquisición y distribución” de esta tecnología en Galicia, para “salvaguardar los derechos de las personas”.
Entre otros aspectos, aún por cerrar a lo largo de la tramitación del texto definitivo, la ley establecerá que todas las actuaciones de la Administración general de la Xunta y del sector público gallego deberán contar con un informe de proyecto de Inteligencia Artificial detallando claramente el funcionamiento y las características. Al mismo tiempo, siguiendo el modelo de la Oficina Europea de la IA, incorporará una evaluación de impacto relativo a los derechos de las personas.
Además de hacer constar la necesidad de la supervisión humana de todos los procesos administrativos cuando sea solicitada por alguna de las personas implicadas en el trámite.
En la actualidad la Administración gallega ya emplea sistemas de inteligencia artificial en distintos ámbitos. Esta tecnología ayuda en la búsqueda de empleo, por ejemplo, mediante una herramienta pionera en España que permitirá hacer un perfil con las competencias de unas 70.000 personas hasta septiembre del 2025.
También en la sanidad, donde ya reduce a una tercera parte las lesiones que pueden pasar inadvertidas en la lectura convencional de mamografías, y permite acelerar la revisión de ciertas pruebas.
Y mientras, se continúan desarrollando herramientas que aplican la IA, por ejemplo, en ámbitos como la Política Agraria Común o la prevención de incendios. Las posibilidades son infinitas, ya están aquí y, a partir de ahora, serán reguladas.
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