REDUCE LA VIDA ÚTIL DE LOS APARATOS ELECTRÓNICOS
La Unión Europea comienza a tomar medidas contra la obsolescencia programada, o lo que es lo mismo, los pequeños o grandes impedimentos que hacen que la vida útil de los aparatos electrónicos se reduzca. Por ejemplo, la legislación francesa ya impone multas de hasta 300.000 euros para evitar estas prácticas.
La ausencia de piezas de repuesto o que el técnico tenga dificultad para acceder a ellas, es uno de los casos en los que aparece la obsolescencia programada. La Unión Europea pretende evitar la entrada de productos que puedan llegar de terceros países y que puedan ser de calidad baja y sin controlar.
Aunque también hay que tener en cuenta, que los avances tecnológicos en este sector van tan deprisa que nos deshacemos de nuestros electrodomésticos mucho antes de que hayan muerto. Por otro lado, España se sitúa a la cola de reciclaje, ya que somos el segundo país que menos aparatos electrónicos recicla. Según Bruselas, se deberían recoger cuatro kilos de residuos por habitante al año. Cifra a la que todavía no llegamos.