LOS PADRES LO VEN COMO ALGO POSITIVO
Ya existen los centros de alto rendimiento para videogamers. En estos centros, los jóvenes aprender a jugar como un profesional, ya que la gran mayoría de ellos, buscan un futuro como jugador de videojuegos o entrenador de un equipo. En estas clases magistrales pueden asistir los padres.
Parece que estas clases son todo ventajas. Los padres afirman que este tipo de centros son positivos para sus hijos, debido a que aprenden a gestionar la frustración y a trabajar en equipo.
En estas 'universidades' del videojuego también se trata problemas como la hiperactividad o problemas de socialización. Además también trata una patología bastante reciente, la adicción a los videojuegos, esto es posible gracias a la gestión correcta de las horas que se pasa un joven delante de una videoconsola.