APPLE PIDE MÁS DE 2 MILLONES DE EUROS
Apple pasó años desarrollando su reconocido iPhone, pero Samsung tomó un atajo al copiar el diseño de su rival. Lo hizo al darse cuenta de que no podía competir, dijo un abogado de la firma estadounidense, mientras el juicio por violación de patentes se acerca a su fin.
Los argumentos finales del juicio entre Apple y Samsung comenzaron el martes en una corte federal en San José, California. El jurado comenzará a deliberar este miércoles.
El abogado de Samsung, Charles Verhoeven, respondió diciendo que los consumidores no se confunden entre los productos de las compañías de teléfonos móviles.
Además, instó a los jurados a considerar que un veredicto a favor de Apple podría ahogar la competencia y reducir las opciones de los consumidores.
"En lugar de competir en el mercado, Apple está buscando una ventaja competitiva en los tribunales", dijo Verhoeven.
Apple cree que "tiene derecho a tener el monopolio de un rectángulo con esquinas redondas y una pantalla grande. Es realmente sorprendente", agregó.
Un triunfo de Apple podría tener un gran impacto en la industria, ya que es el segundo proveedor de 'smartphones' de los mercados, después de la surcoreana.
Además, los dispositivos de Samsung operan con el sistema Android de Google, un software popular que es utilizado por muchos otros fabricantes.
El abogado de Apple, Harold McElhinny, instó a los jurados a considerar el testimonio de una diseñadora surcoreana. Esta afirmó que trabajó día y noche en los teléfonos de Samsung, durante un periodo de tres meses.
"En esos tres meses claves, Samsung pudo copiar e incorporar el resultado de los cuatro años de inversión de Apple en trabajo duro y creatividad, sin asumir ninguno de los riesgos", dijo McElhinny.
Apple busca más de 2.500 millones de dólares (2.014 millones de euros) en compensación por daños de parte de Samsung.
Un experto de Apple afirmó que Samsung obtuvo unos márgenes de un 35,5 por ciento en los teléfonos considerados en la demanda. Esto comprende un periodo que va desde mediados de 2010 hasta marzo del 2012, a partir de unas ventas de 8.160 millones de dólares (6.576 millones de euros) en Estados Unidos. Samsung ha cuestionado esa cifra.
Apple acusa a Samsung de copiar el diseño y algunas características del iPhone y del iPad. La compañía exige que se prohíban sus ventas en Estados Unidos, además reclama una compensación económica por los daños sufridos.
Samsung, que intenta ampliar su presencia en Estados Unidos, dice que Apple violó varias de sus patentes, en especial las relacionadas con su tecnología inalámbrica.
McElhinny presentó lo que dijo que era una evidencia cronológica que demostraba que Samsung copió los diseños de Apple.
También se quejó del comportamiento en el juicio de la surcoreana. Mientras que Apple llamó a declarar a varios de sus máximos ejecutivos, Samsung no presentó a nadie con un gran puesto de responsabilidad.
"Desde el comienzo, Samsung no ha respetado este proceso", afirmó.
McElhinny instó a los jurados a considerar los documentos internos de Samsung. En ellos, la compañía compara sus productos a los de Apple. Además, determinan que la surcoreana sufría una crisis de diseño.
El abogado de Apple también remitió a la reunión de febrero de 2010 entre Samsung y Google, en la que Google le pidió a la firma surcoreana que dejara de imitar tanto al iPad.
Apple dijo que los productos eran tan similares que provocaban confusión en el mercado.
Por su parte, el abogado de Samsung, Verhoeven, dijo que Apple no ha mostrado evidencia alguna de que los consumidores hayan sido realmente engañados para comprar productos de la empresa surcoreana en lugar del iPhone o el iPad.
"Los consumidores toman decisiones, no cometen errores", subrayó.